500.000 euros paralizan el rastreo de las víctimas del descuartizador

«No hay dinero suficiente» para seguir los trabajos en el vertedero de Pinto

La búsqueda de los cádaveres de las presuntas víctimas del descuartizador de Majadahonda podría quedar en suspenso hasta nuevo aviso. La delegada del Gobierno en Madrid aseguraba ayer que «no se dispone del dinero suficiente» para continuar con las labores en el vertedero de Pinto que tratan de localizar los restos de Adriana Gioiosa, la inquilina del chalé propiedad del detenido por su desaparición, y de la tía de Bruno, a quien nadie ve desde hace cinco años. De momento, aseguró Concepción Dancausa, estos trabajos han quedado paralizados porque, para continuarlos, hace falta invertir medio millón de euros. Preguntada por los medios de comunicación, tras copresidir la Junta Local de Seguridad de Majadahonda, junto al alcalde de la localidad, Narciso de Foxá, la delegada explicó que, a pesar de los problemas económicos, «hay una orden judicial» para que se inicie la búsqueda.

Los agentes encargados de este caso arrancaron la investigación el pasado mes de mayo, tras presentar una denuncia por desaparición la familia de la inquilina del chalé, ubicado en El Plantío. Las pesquisas revelaron que también podría haber sido víctima la propia tía del casero. La búsqueda se planteó en el vertedero de Pinto porque es donde se traslada la basura de Majadahonda. «Hay una orden judicial para que se inicie la búsqueda en el vertedero, pero no se dispone del dinero suficiente, del crédito suficiente para iniciar esa búsqueda. Se inició una pequeña búsqueda que se paró, y de momento está parada, pero se iniciará cuando se consiga la cuantía», relató Dancausa en declaraciones recogidaspor Europa Press. Asimismo, la delegada señaló que el vertedero de Pinto es «enorme» y que la búsqueda en el mismo «requiere medio millón de euros».

Así, relató que la búsqueda inicial se realizó donde «se depositaron las bolsas» pero «ahí no se encontró». «Se esperaba que las bolsas que se había visto, que se habían depositado, pudieran contener restos de los cadáveres, pero no fue así», añadió. «Hay que hacer una búsqueda mayor y esa búsqueda mayor tiene un coste importante y se está tratando de buscar los fondos para hacerlo», concluyó.

Desde que fuera detenido el pasado abril, Bruno Hernández Vega, el presunto descuartizador de Majadahonda, no ha facilitado su trabajo a los agentes de la Guardia Civil encargados del caso. Los investigadores localizaron restos de ADN de Alejandra, su inquilina, y también de su tía en la picadora que guardaba en el sótano de una vivienda de su propiedad en esta localidad.