«Tenemos sólo cuatro taxis para servicios mínimos»

Preocupación por la imagen de la capital entre los turistas

La protesta que colapsa el Paseo de la Castellana se mantendrá, al menos, hasta hoy. A falta de reglamentación de los servicios mínimos, el propio colectivo aprobó en asamblea una suerte de «servicios mínimos» o «sociales» de atención para casos especiales, que son gratuitos, y que se han estado aplicando en la capital desde el pasado lunes. No obstante, ayer no se prestaron con eficacia.

A diferencia de los paros en aerolíneas como Ryanair o en la red de ferrocarriles de Renfe, los taxis no tienen la obligación legal de mantener servicios mínimos durante su protesta. De todos modos y, según anunciaron, a partir del pasado lunes centenares de voluntarios pondrían en marcha unos servicios mínimos gratuitos en la capital, establecidos en hospitales para urgencias y colectivos especialmente vulnerables –personas ancianas, con tarjeta de discapacidad, familias con niños pequeños y personas con movilidad reducida–. Si bien es cierto que el primer día en que se establecieron estos servicios había una veintena de taxis aparcados en las estaciones de Atocha o Chamartín, las paradas habilitadas para este servicio en los hospitales de la Paz o Gregorio Marañón permanecieron prácticamente deshabitadas casi durante toda la jornada del lunes.

Asimismo, ayer a las 10:30 horas, en la estación de Atocha-Renfe el número de taxis se podía contar con los dedos de una mano. Lo mismo en Chamartín. Los aparcamientos reservados para taxistas también estaban desolados en el aeropuerto de Barajas y en el intercambiador de Méndez Álvaro. El vaivén de taxistas fue perdiendo cadencia en la estación de trenes y hacia las 18:00 horas, en Atocha no se veía un sólo vehículo. Esta situación provocó problemas importantes entre los usuarios: «Al llegar veo que no hay taxis, voy cargado con maletas y mi única opción es recurrir a un VTC», confesaba un viajero. «Y eso que hace tiempo que tengo desinstalada esta aplicación porque una vez me cobraron tres servicios de 8 euros que no había realizado», añadía.

«Con motivo de la huelga general, ahora mismo sólo tenemos cuatro taxis para servicios mínimos». Ésta fue la respuesta que obtuvo Cecilia cuando llamó a Radio Teléfono Taxi para ver qué posibilidades tenía de pedir un vehículo que le llevara al hospital para acudir al fisioterapeuta. Al final, perdió la cita. «El hospital está a un kilómetro de mi casa. No puedo ir hasta allí en muletas. Estamos en agosto y ahora mismo no tengo amigos en Madrid que me puedan llevar. Mis padres son mayores y no conducen. De hecho, mi padre sufrió un mareo en casa y llamamos para ver si un taxi le podía recoger para ir al hospital. Nos dijeron que no, que los taxis se encontraban en los hospitales. Los taxistas se ponen muy “gallitos”, pero, ¿qué pasa con la gente?», relató. Así, para poder acudir hoy al hospital, ha tenido que alquilar una silla de ruedas con un coste de 40 euros.

«Que le lleve un familiar»

«Buenas tardes, tengo que llevar a mi abuela al hospital». De esta manera inició el contacto Marta, a través de Tele Taxi. «Pero, ¿es una urgencia? ¿Se ha caído?», pregunta la teleoperadora. La conversación se zanja así: «Sólo disponemos de servicio para emergencias, no para acudir a citas médicas. Tendrá que llevarle un familiar».

Pero los madrileños no son los únicos afectados. El portavoz de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM), Francisco Aranda, solicitó al «desaparecido» Gobierno de Pedro Sánchez «una solución» ya que, de alargarse, esta situación podría afectar «no sólo a los comerciantes, sino a la imagen de la ciudad». «En Madrid tenemos uno de los mejores servicios públicos del mundo», consideró, «pero el turismo tiene un impacto económico muy importante para la capital –mayor, además, en julio y agosto–, que depende tanto de la satisfacción de los visitantes como de su capacidad de movilidad».

Por el momento, la hilera blanca de taxistas no se desmantelará, según comunicaron ayer desde Élite Taxi Madrid, ya que su intención es esperar a conocer el resultado de la Conferencia Nacional del Transporte (CNT), programada para las 18:30 horas de hoy. Así, los huelguistas sólo liberarán el eje financiero de la capital, si se cumplen dos premisas. Que se rompa el «cheque en blanco» de licencias VTC y se marque una fecha en el calendario para su limitación es una. La segunda, que se produzca una delegación de competencias para la expedición de estas licencias del Gobierno a las comunidades autónomas y los Ayuntamientos.

Otra noche de acampada

«Sólo fui a casa a las 2:00 horas, a ducharme». Al cierre de esta edición, Lorenzo Sánchez tenía claro que la acampada proseguiría. Antes incluso de celebrarse la asamblea. «Está siendo duro. A nadie le sienta bien dormir en un coche», pero «el apoyo de distribuidores de prensa (que llegaron a las 5:00 horas) y de taxistas portugueses fue reparador».