Una escapada de lujo a una isla privada de las Seychelles

Desconectar por completo en el paraíso es posible. Olvídate de las llamadas, la conexión a Internet y la televisión para relajarte en las playas vírgenes que rodean esta isla privada y conectar con la naturaleza y la fauna marina más fascinante. En ella hay miles de experiencias que vivir tanto por tierra como por mar.

Un tipo de aislamiento opcional entre puestas de sol tropicales y los secretos que aguarda, donde podrás alojarte en un especial resort con varias categorías de alojamiento decoradas por los carpinteros sheychelenses de la zona.

Denis Private Island cuenta con un total de 25 cabañas y villas privadas independientes separadas por la vegetación de la isla donde desconectar. En cada una de ellas los baños se encuentran al aire libre. ¡Todo un gustazo!

Cabañas de Playa

Tres cabañas de 90 metros cuadrados disponibles en primera línea de playa. El mar es lo primero que verás nada más despertar y lo último al acostarte desde las tumbonas o desde la terraza, mientras tienes a tu disposición todas las comodidades necesarias para el descanso.

Cabañas de Playa Deluxe

Si todavía necesitas más espacio interior en el que moverte, las cabañas Deluxe van un paso más allá que las anteriores. De este tipo de alojamiento hay 10 disponibles en la isla privada de Denis, de 110 metros cuadrados cada una, con el plus de un jardín privado donde disfrutarás de un trocito de playa durante la estancia y una terraza con sala y cama desde la que divisarla.

Frente a la Playa Cabañas Spa

Más lujo, más relax, más amplitud y más confort es lo que te espera en una de estas otras diez cabañas de 150 metros cuadrados ubicadas también en primera línea de playa. Aquí sumamos a las primeras unos acomodados sofás, cama extragrande y acceso al pabellón de masaje y jardín.

Villa de Playa

La reina de la isla es esta villa de lujo para los más afortunados. El alojamiento cuenta con su propia playa privada, patio privado con pabellón y piscina que la diferencian del resto. Toda su cubierta se extiende frente al mar para no perder ni un segundo de vista los regalos que ofrecen las Seychelles.