Movilidad
¿Un híbrido entre barco y coche de Ferrari? Sí, existe y se llama Arno XI
Si pensabas que lo de Ferrari solo son automóviles deportivos, te equivocas. Hubo un momento en la historia en el que la firma de Maranello colaboró estrechamente para crear su única embarcación, que es también la más veloz del mundo.
El nombre original de esta obra de arte propulsada en 1952 por el piloto de barcos Achille Castoldi con ayuda de la Scuderia Ferrari, es Ferrari Arno XI. Y la historia de sus orígenes es fascinante.
Castoldi era un reconocido piloto e ingeniero de competición en su modalidad, que obtuvo numerosos récords de velocidad. No conforme con ello, a Castoldi se le ocurrió la idea de crear un aparato con el que batir todas sus marcas anteriores en la categoría de 800 kilos, para lo que era necesario contar con un proveedor diferente al que tenía en aquel momento.
Después de observar los logros de sus amigos, los pilotos de Fórmula 1 Luigi Villoresi y Alberto Ascari con Ferrari, Achille le presentó su petición a Enzo Ferrari. Fue entonces cuando habló directamente con él para que le prestara uno de los motores que usaba en su vehículo de competición, el Ferrari 375 F1 (un V12 de 4.8 litros y 385 CV de potencia) y le contó su proyecto personal de crear el vehículo más rápido de la historia sobre el agua. A Enzo, le pareció una idea fascinante y aceptó participar en él de principio a fin.
Tanto el director de diseño de motores, Aurelio Lampredi, como los ingenieros de competición del equipo de la Scuderia de Ferrari, se involucraron en la fabricación del Arno XI para que, con la nueva máquina, el piloto de barcos consiguiera bajo su sello, batir todos los récords establecidos hasta la fecha.
Para que esto fuera posible, el motor original para los coches de Fórmula 1 tuvo que ser modificado, y de ese modo pudiera alcanzar entre los 550 CV y los 600 CV transmitidos al agua a través de una hélice que daba hasta 10.000 vueltas. Un arduo trabajo que finalmente dio sus frutos.
De la construcción del Ferrari Arno XI se encargó el diseñador de barcos Cantieri Timossi, que añadió al hidroavión una madera maciza chapada en caoba marina con la estructura de los monoplaza Ferrari y, obviamente, pintada en su característico tono de rojo, el Rosso Corsa.
Una vez completado por dentro y por fuera, en 1953, Castoldi se puso a los mandos del Ferrari Arno XI hasta en tres ocasiones. Fue en el Lago Iseo de Bérgamo (Italia), cuando tras otra serie de adaptaciones en el hidroavión, Castoldi consiguió su propósito: batió el récord de velocidad sobre el agua en la categoría de 800 kilos, con una marca de más de 241,71 kilómetros por hora en dos pasadas y con una velocidad media de 164,70 kilómetros por hora en hacer 24 millas náuticas.
Recientemente, con motivo del 70 aniversario del Arno XI, Ferrari Classiche ha restaurado el exterior e interior de su joya náutica para ser puesto en venta: “Este es uno de los motores más importantes de la historia de Ferrari. Hemos restaurado los Ferrari más raros y valiosos jamás fabricados, pero, desde luego, solo hemos trabajado con motores y carrocerías de coches. La restauración de este motor Ferrari de 1952, fabricado de manera artesanal específicamente para esta instalación exclusiva, es una experiencia única en la vida para todos los que trabajamos en la sede de Ferrari”, aseguró el director de Ferrari Classiche.
✕
Accede a tu cuenta para comentar