El informe True-Luxury Global Consumer Insightrevela que, tras una caída en su facturación del 39,8% en 2020 (situándose en los 195.000 millones de euros), la industria del lujo ha crecido en lo que llevamos de 2021 hasta los 254.000 millones y está muy cerca de los niveles prepandemia. De hecho, se espera que en 2022 establezca un récord y llegue a los 389.000 millones de euros.

Una grandísima noticia que los amantes del sector celebran, aunque siempre con prudencia y precaución, por supuesto. Hermès podría ser uno de los ejemplos perfectos de recuperación económica en el sector. La casa especializada en accesorios de cuero y relojes de alta gama ha sido la empresa francesa que más ha crecido en la bolsa gala en los que llevamos de 2021, superando su propia marca histórica.

La firma ha ascendido un 87% en el denominado Cac francés, integrado por las 40 compañías más importantes del país. La bolsa gala, por cierto, también se ha convertido en una de las más alcistas de Europa. Fue el 19 de noviembre cuando Hermès alcanzó sus máximos históricos al conseguir una cotización de 1.675 millones de euros, algo que hizo catapultar su capitalización hasta los 176.882 millones.

Y es que solo en el tercer trimestre del año, la casa francesa mejoró sus ventas en un 31%, consiguiendo embolsar un total de 2.370 millones de euros, tal y como indicó en la presentación de sus resultados. Con ellos, la compañía ya ha conseguido cerca de 7.000 millones de euros en ventas en los nueve primeros meses del año.

Una subida que ha llegado de la mano de la recuperación del mercado asiático, el gran consumidor de lujo mundial. Concretamente, en el continente, ha ascendido un 63%. Por cierto, hace unos días Hermès anunció que había vendido a un comprador anónimo su bolso inspirado en la fabulosa actriz Jane Birkin por la friolera de 112.000 euros.