La explosión de una moto desató el fuego en Robledo de Chavela

Así comenzaba el fuego

«Se ha caído Roberto, la moto ha quedado reventada, ha explotado y aquí se está quemando». Así describía uno de los motoristas lo que, todo apuntaba, podría ser el comienzo del incendio que se desataba en el Cerro San Benito, al inicio del Puerto de la Cruz Verde, en la carretera M-512, muy frecuentada por los aficionados a las dos ruedas. Eran las 12:20 horas de este domingo cuando se iniciaba el fuego en una ladera de monte bajo y enebral junto a la carretera en el término municipal de Robledo de Chavela, aunque lejos de la población. La moto siniestrada quedaba junto a la cuneta y, tras explotar, las llamas se extendían rápidamente por la zona. Eran los propios motoristas los que daban el aviso a los servicios de emergencias.

Debido a la fuerza del viento, las llamas se propagaron con celeridad y los efectivos forestales se vieron superados por la topografía del terreno, así como por el material combustible, lo que hizo que tuvieran que replantear constantemente el ataque al fuego debido a los rápidos cambios de viento. Hasta la noche ya se habían calcinado algo más de 200 hectáreas de terreno de alto valor ecológico, sin que se tuviesen que lamentar heridos o intoxicados por humo. Pero durante toda la tarde las llamas estuvieron amenazando la población de Zarzalejo y su pinar centenario y, a última hora, variaba en dirección a Robledo de Chavela, donde varias pequeñas casas tuvieron que ser desalojadas por precaución, según confirmó a Telemadrid el alcalde de Robledo de Chavela, Fernando Casado, quien mostraba su preocupación por la evolución del incendio con el cambio de dirección del viento y la retirada de los efectivos aéreos, al tiempo que afirmaba que si se daba la orden de desalojo habilitarían el polideportivo y el frontón.

Por su parte, Rafael Herranz, alcalde de Zarzalejo, mostraba una ligero alivio al alejarse las llamas de las proximidades de su municipio por ese mismo cambio en la dirección del viento. «Ya teníamos preparado el plan de evacuación, unas 800 o 1.000 personas», aseguraba. No obstante, varias casas dispersas, alejadas de núcleos urbanos, en las zonas de la Povedilla y los Cercones, en las proximidades de las localidades madrileñas de Robledo de Chavela y Zarzalejo han sido desalojadas por prevención. Además, Cruz Roja de la Comunidad de Madrid ha desplegado un albergue completo para las personas desalojadas por el incendio. Según han informado en redes sociales, se ofrecerá a los afectados un kit básico de higiene personal, alimentación y bebidas hasta que puedan regresar a sus hogares.

Nivel 2

A lo largo de la tarde, viendo la evolución que tomaba el fuego por parte del puesto de mando de Seguridad y Protección Civil de la Comunidad de Madrid, se declaraba el nivel 2 del Plan contra los Incendios Forestales (Infoma), lo que permitía solicitar ayuda a la Unidad Militar de Emergencias, ante la intensidad de las llamas y la proximidad a zonas pobladas. Así lo confirmaba el director general de Seguridad y Protección Civil, Luis Miguel Torres, quien destacaba que el puesto de mando avanzado se había desplazado de la zona del Puerto de la Cruz Verde a la de Zarzalejo, y se estaba inventariando los efectivos disponibles con la llegada de voluntarios, bomberos y la UME para tratar de evitar que el fuego pudiese llegar a las zonas habitadas.

En total, desde el comienzo de las labores de extinción se contó con medios de la Comunidad de Madrid, Castilla y León, el Ministerio de Transición Ecológica y los efectivos de la UME, lo que supuso la participación de 16 dotaciones de bomberos de la Comunidad de Madrid, cuatro brigadas helitransportadas y brigadas forestales de la Comunidad, BRIF de La Iglesuela, agentes forestales y dos hidroaviones del Ejército del Aire además de un helicóptero Kamov de la Comunidad. La UME acudió con una primera y segunda unidad de intervención con cerca de 70 hombres, seis autobombas, un camión cisterna y un vehículo tipo bulldozer con pala, según detalló Aurelio Soto, portavoz de la UME.

Tras la retirada de los medios aéreos por la falta de luz –que fueron la principal línea de ataque ante las difíciles condiciones de acceso del terreno con una orografía complicada– estaba previsto que durante la noche se procediera a «situar a los efectivos de tierra en zonas seguras», según destacó Pedro Antonio Ruiz, director general de Emergencias de la Comunidad. Este «cambio de estrategia» estaba enfocado a proteger con trabajo nocturno las poblaciones amenazadas. Además a la dificultad para hacer frente a las llamas se unió el riesgo de explosiones de obuses de la Guerra Civil que se encuentran en el lugar y que obligó a las brigadas de extinción a retirarse de una de las zonas.

Guardia Civil se realiza el control de las carreteras (siguen cortadas las carreteras M-533 y la M-512) y el tráfico ferroviario que opera Renfe entre las estaciones de Zarzalejo y Santa María también ha quedado suspendido.

El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, envió un mensaje en el que informaba que estaba siguiendo con preocupación el desarrollo del incendio y agradecía sus esfuerzos a los efectivos que trabajan en la extinción, los que enumeró en un mensaje adjunto.