Patrimonio Nacional

Fundido en negro (energético) del Palacio Real de Madrid, el de Aranjuez y el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

El Teatro Real mantendrá una temperatura del aire interior, en los recintos climatizados, no inferior a 27 grados, como exige Moncloa

Las primeras medidas del real decreto de ahorro energético aprobado por el Gobierno entrarán en vigor este miércoles, entre las que se incluye apagar las luces de escaparates y edificios públicos que estén desocupados a partir de las 22:00 horas, norma que no se aplicará al alumbrado ornamental de monumentos, salvo que sean edificios públicos que a dicha hora estén desocupados.

Así las cosas, el Teatro Real comenzó desde este lunes a apagar su iluminación a las 22:00 horas, con excepción de los días en los que haya funciones o eventos, según ha informado la directora de Infraestructuras y Servicios Generales de la institución, Nuria Gallego.

Además, en cumplimiento del real decreto de fomento del ahorro y la eficiencia energética, la temperatura del aire interior en los recintos climatizados en el Teatro Real se limita a los siguientes valores: en los recintos calefactados no será superior a 19 grados; en los recintos refrigerados no será inferior a 27 grados; y la humedad relativa se mantendrá entre el 30% y el 70%.

Precisamente, la norma aprobada por el Gobierno establece limitar a 27 grados el uso del aire acondicionado en verano y a 19 grados la calefacción en invierno en edificios públicos, espacios comerciales y grandes almacenes, infraestructuras transporte, espacios culturales y hoteles.

En cumplimiento de este real decreto, todos los edificios de Patrimonio Nacional, como los Palacios Reales de Madrid, Aranjuez (Madrid) y La Granja (Segovia) o el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial (Madrid), apagan desde hace varios días su iluminación, incluida la monumental, según han confirmado fuentes de Patrimonio, que señalan como excepción la necesidad de iluminar eventos culturales y abiertos al público durante la noche que se celebran en estos espacios.

Del mismo modo, precisan que en monasterios donde viven comunidades religiosas, como el Monasterio de las Descalzas Reales de Madrid, se mantendrá la iluminación necesaria para el normal desarrollo de la vida de la comunidad.

En Madrid, la Catedral de la Almudena la gestiona el Ayuntamiento de Madrid, según han informado fuentes del Arzobispado madrileño, que apuntan que, en principio, en el resto de templos se adoptarán las pautas del Gobierno.