Ayuso acusa a la izquierda de promover el “terror sindical y político” en la sanidad

La situación de los centros públicos de urgencias extrahospitalarias ha centrado una buena parte del debate en la sesión de control al Gobierno en el pleno de la Asamblea en la que la presidenta regional ha alertado del “terror sindical y político” que está sembrando la izquierda con su puesta en funcionamiento.

Ayuso lamentó que el 60% de las bajas sobrevenidas de médicos no hayan ayudado en los primeros días de entrada en funcionamiento de los 80 centros, pero ha apelado a la responsabilidad de los profesionales sanitarios para que el servicio se pueda desarrollar con normalidad. No obstante, ha informado de que estos centros de urgencias extrahospitalarias han atendido ya a 10.700 personas que lo han necesitado sin incidencias reseñables, pese al “ruido político que se está haciendo” por abrirlos.

“Es ahora cuando la izquierda ha dicho: tendremos que poner una pancarta en cada uno de esos centros no sea que la sanidad vaya bien y no tengamos una mínima excusa para presentarnos en las elecciones del año que viene”, añadió.

La apertura de los centros de urgencias fue también motivo de enfrentamiento entre la portavoz de Más Madrid, Mónica García, y el del PSOE, Juan Lobato.

“Pida perdón”

García anunció que interpondrá una denuncia ante la inspección sanitaria por el funcionamiento de estos centros y exigió a Ayuso que “pidiera perdón a los sanitarios amenazados y agredidos porque ustedes les ponen en una diana y los pacientes que han estado peregrinando de centro de salud en centro de salud buscando un médico que les pudiera prescribir su medicación... Pida perdón por poner en juego nuestra salud y nuestra sanidad pública...Si no lo hace, lo mejor que puede hacer es irse”.

Ayuso evitó entrar en las “provocaciones” de García pero refirió que cuando visita los hospitales los médicos la dicen que les “abochorna su trabajo y no les representa porque les politiza. Es la única sanitaria que quiere el caos en la sanidad pública, que se aprovecha de lo público para boicotearlo desde dentro”, dijo refiriéndose a la labor de la portavoz de Más Madrid.

“Míreme y dígame que sabe lo que hace”

Juan Lobato, el portavoz del PSOE, también pidió a Ayuso que rectificara: “trague saliva, pida disculpas y rectifique (...) Es difícil hacer tanto daño en tan poco tiempo a la sanidad”, la reprochó. “¿Acaba de echar a 6.000 y nos dice que no hay médicos? ¿Qué broma es esta? Míreme y dígame que está usted al mando y sabe lo que hace”.

Ayuso, sin embargo, replicó a Lobato que más que con sanidad, el asunto tenía que ver “con la debacle que va a sufrir su partido las próximas elecciones. El PSOE está hundido en la Comunidad y solo saben vivir de sembrar el miedo entre los mayores. Cada vez que a la izquierda le va mal, recurren a la sanidad pública, a la que pretenden boicotear porque solo saben vivir de sembrar el terror y el miedo entre los ciudadanos, empezando por los mayores”.

“Es fácil ser de Vox y criticarlo todo”

El asunto también alcanzó tangencialmente a la portavoz de Vox, Rocío Monasterio, que en el rifirrafe que tuvo con la presidenta regional sobre las medidas posibles para reducir el gasto improductivo, acabó hablando de sanidad. Monasterio pidió retirar las subvenciones a los sindicatos “de la hoz y el martillo”. Ayuso le pidió partidas concretas en las que recortar. F fue entonces cuando la portavoz de Vox acabó proponiendo: 72 millones en la promoción de su gobierno o más de 20 millones en cursos de formación a sindicatos. “Dedique ese dinero a pagar a los médicos y los madrileños no tendríamos un problema”. Pero la deriva de la petición acabó irritando a Díaz Ayuso: “¿Ahora se va a poner a la cabeza de las mareas blancas cuando nunca ha habido tantos sanitarios y mejor pagados? Es fácil ser de Vox, no hacer nada y criticar todo”.