Música

Andy y Lucas se despiden ante un Vistalegre rendido

El dúo gaditano ha cerrado esta noche en Madrid su gira ‘Nuestros últimos acordes’ con un concierto “sold out” ante 8.000 personas, en una despedida cargada de emoción, nostalgia y gratitud

MADRID, 10/10/2025.- Un momento del concierto de Andy y Lucas con el que se despiden definitivamente de los escenarios, este viernes en el Palacio de Vistalegre (Madrid). EFE/ Juanjo Martín
Concierto de Andy y LucasJuanJo MartínAgencia EFE

El Palacio de Vistalegre ha vivido esta noche, una de esas noches que se quedarán grabadas en la memoria de los fans de la música española. Con todas, las 8.000 entradas vendidas y el cartel de "sold out" colgado desde hace semanas, Andy y Lucas han puesto punto final a más de dos décadas sobre los escenarios con el último concierto de su gira "Nuestros últimos acordes". Una despedida que ha sido mucho más que un espectáculo: un encuentro después de mucha polémica entorno al dueto, emociones a flor de piel y gratitud compartida.

Desde primeras horas de la tarde, el ambiente alrededor del recinto ya anunciaba que iba a ser una noche especial. Grupos de seguidores con camisetas, pancartas y guitarras se congregaban a las puertas de Vistalegre, dispuestos a decir adiós a los dos gaditanos que han puesto banda sonora a buena parte de sus vidas. Algunos venían desde Cádiz, Sevilla, Málaga o incluso desde fuera de España. “No podía faltar a su última cita”, decía una fan entre lágrimas antes de entrar.

"Eternos por un momento"

Cuando las luces se apagaron y el público empezó a corear su nombre, la emoción fue inmediata. Andy y Lucas aparecieron sobre el escenario con una mezcla visible de alegría y nostalgia. Durante dos horas han repasado los grandes momentos de una trayectoria que los ha llevado a vender más de dos millones de discos, recibir decenas de premios nacionales e internacionales y ofrecer más de 800 conciertos ante millones de espectadores.

El concierto comenzó con “Quiéreme”, seguida de “Hasta los huesos”, “Aquí sigo yo” y “Llévatela”. Poco a poco, fueron desgranando un repertorio que repasaba toda su carrera: “Por ella”, “Quiero ser tu sueño”, “En tu ventana”, “Echándote de menos”, “Carita morena”, “Dime que me quieres”, “Lola” o “Mírame a la cara”. El público acompañó cada canción con palmas, coros y teléfonos iluminados, mientras Lucas llevó la voz cantante durante todo el concierto.

Pese a que la distancia y la falta de complicidad entre ambos fue evidente durante todo el concierto, no faltaron los momentos de gratitud hacia sus fans, su familia y su equipo durante toda su carrera. Sin duda, el momento más emotivo fue cuando ambos dedicaron unas palabras para ellos. "Estoy feliz y agradecido por haber tenido la oportunidad de vivir estos 22 años de carrera, hemos tenido nuestros altibajos, pero si seguimos aquí es gracias a vosotros", decía Andy. "Habéis sido el colofón Madrid, siempre lo ha sido. Muchas gracias por todos años", añadía.

Por su parte, Lucas, optó por leer unas palabras: "Hoy es una noche especial, una de esas que nadie olvida. Cuesta encontrar las palabras pero estamos muy agradecidos con todos los que nos han acompañado. Nada de esto sería posible sin vosotros", comenzaba diciendo. Después dedicó unas palabras especiales a su familia, por creer en ellos cuando ni ellos mismos lo hacían y a su padre -fallecido hace seis años- y a su hermano, fallecido hace sólo dos meses. Por último, quiso dedicar unas palabras a Andy: "A mi compañero, hermano y amigo. Por cad locura, momento difícil... hemos crecido juntos, compartido sueños... más que un final esta es una celebración de la música, de la amistad y de todo lo que hemos vivido juntos", dijo visiblemente emocionado. "Gracias por formar parte de nuestra historia y hacernos sentir eternos por un momento. Os llevaremos siempre en nuestro corazón".

Por la puerta grande

El concierto contó también con la presencia de dos artistas invitados que quisieron sumarse a la despedida: María Peláe y Nolasco. Cada uno de ellos compartió escenario con el dúo gaditano en un ambiente de cariño y respeto mutuo. Uno de los instantes más intensos llegó con “Nuestros últimos acordes”, el tema que da nombre a la gira y que sonó como un resumen de todo lo vivido y la proyección de un vídeo resumen que habían hecho sus fans. Después llegaron “Son de amores” , “De qué me vale”, “Me estoy volviendo loco” y, finalmente, “Tanto la quería”, la canción que marcó una generación y con la que cerraron el concierto.

A lo largo de la noche, el público fue un protagonista más. Lucas se encargó de hacerles partícipes con cánticos, juegos y canciones que les invitaba a terminar. El concierto terminó como este mismo prometió: saliendo por la puerta grande. Él a hombros de un miembro de seguridad y Andy, mientras se hacía hueco y saludaba a todos los asistentes.

Veinte años de música y amistad

Pocos dúos pueden presumir de una historia como la de Andy y Lucas. Nacidos en Cádiz en 1982, Andrés Morales y Lucas González fueron compañeros de clase antes de convertirse en compañeros de escenario. Sus primeros acordes nacieron casi por casualidad, con guitarras prestadas y sueños por cumplir. Su primer álbum, publicado en 2003, los catapultó a la fama con canciones que se convirtieron en himnos generacionales.

Con el de esta noche, la gira "Nuestros últimos acordes" pone su punto final tras recorrer buena parte de España, Europa y Latinoamérica, llenando escenarios y agotando entradas en cada parada. Madrid fue el cierre natural de un camino que empezó en los barrios de Cádiz y que ha cruzado fronteras, dejando tras de sí un legado de canciones y emociones.

Fuera del recinto, muchos fans se resistían a marcharse, cantando a capela los estribillos de siempre. Porque más allá de los premios y los récords, el verdadero éxito de Andy y Lucas está en haber acompañado la vida de millones de personas con su música sincera, cercana y profundamente humana. Puede que Andy y Lucas bajen del escenario, pero su eco seguirá sonando. Y esta noche, en Vistalegre, ese último acorde fue también una promesa: la de que algunas canciones nunca se despiden del todo.