Gastronomía

Baldoria entre el Top-10 mundial de pizzerías

Todo lo que toca Ciro Cristiano lo convierte en oro

Los chefs detrás de Baldoria
Los chefs detrás de BaldoriaBaldoria

Paella, jamón, tortilla de patatas, gazpacho…Todas estas son auténticas joyas de la gastronomía patria, no me lo negarán. Piensen un mundo sin ellas, sin duda la felicidad de cada uno de nosotros caería en picado. Si bucean en sus mentes, se darán cuenta que son pocos los momentos de disfrute absoluto que no están vinculados a la gastronomía —no piensen tanto que se me van a otros derroteros más picantes— y a una mesa de diez. Los que somos de morro fino no podemos vivir sin estos manjares, pero hay vida más allá de España. Y, es que, si hay un plato internacional al que es imposible resistirse y que ha calado muy profundamente, ese es, sin duda, la pizza. Y Madrid aquí es caballo ganador porque contamos con la maestría y excelencia de Ciro Cristiano.

Para los que amamos la pizza y la gastronomía italiana, Circo Cristiano es como un santo al que hay que venerar con vehemencia, el adalid de la excelencia culinaria española. Pero es que, además, todo lo hace bien, y su palmarés de premios lo avala. El último: entrar en el top 10 de las mejores pizzerías del mundo con Baldoria. Sí, lo han leído bien. Octava posición en el ranking mundial más prestigioso del sector, el '50 Top Pizza World'. De Madrid al cielo... y a Nápoles, donde tuvo lugar la ceremonia. Allí, el pasado lunes, con esmero y mucha emoción, se anunció el nombre de Baldoria casi al final de la lista. Y no crean que es sólo por la pizza —que ya es de nota—, sino por todo lo que ocurre alrededor de la mesa: el servicio, la decoración, la música y la alegría contagiosa.

Baldoria no es un golpe de suerte. Es el punto álgido —de momento— de un recorrido trazado con bisturí por un napolitano que ha entendido Madrid como suya. Que ha llegado para quedarse. Porque Ciro Cristiano no ha montado un restaurante, ha montado un imperio de la pizza y la pasta. Desde su desembarco en la capital, sobre todo en su etapa en solitario, Ciro ha ido levantando ladrillo a ladrillo un ecosistema gastronómico con acento italiano y corazón castizo. En 2022 fue el estreno de la premiada Baldoria, su primer proyecto como empresario independiente. Y el nombre no engaña: baldoria en italiano significa jolgorio, jarana, fiesta. Y eso es justo lo que propone este local: la cara más alegre, sabrosa y auténtica de Italia, pero con código postal madrileño.

A Baldoria le siguió la expansión con la familia Beata Pasta, que ya suma tres locales en Madrid —Bilbao, Gran Vía y Princesa—, más un córner en el Gourmet Experience de El Corte Inglés. Un modelo más informal, con pasta casera como hilo conductor, pero sin perder ni un gramo de autenticidad. Si Baldoria es la trattoria con glamour, Beata Pasta es la taberna moderna donde la pasta vuela y la mozzarella se derrite al ritmo de los temazos italianos de los 90.

Pero el verdadero secreto de Ciro no está solo en los hornos ni en la masa. Está en el equipazo que ha sabido reunir. El Grupo Baldoria está formado por grupo humano con alma, italiano de pura cepa casi en su totalidad, y que tiene las ideas muy claras. Ciro Cristiano ha confiado los mandos de la cocina a Simone Attolini, que lleva la batuta con mano firme y creatividad desbordante. El empresario italiano lo dejó claro desde un primer momento cuando puso la primera semilla del imperio Baldoria: «Quiero que la gente viaje a Italia sin salir de la M30». Y claro, eso ha hecho que los premios no tardasen en llegar. Primero, el número dos en Europa, que ya es decir. Pero ahora… ahora han tocado el cielo con la mano. Están ahí arriba, codeándose con auténticos monstruos de la pizza napolitana, con templos consagrados desde hace décadas. Y ellos, con solo tres años de vida, han puesto a Madrid en el mapa pizzero internacional.

Así que, sí, aplaudamos la gesta de Baldoria en el ranking mundial. Pero miremos más allá. Porque lo que Ciro ha construido en Madrid va mucho más lejos de una lista.