Carta de una madre indignada por una EVAU desigual y el examen "casi imposible" de Matemáticas

Soy una madre de una estudiante que ha realizado las pruebas de acceso a la universidad (EVAU) en la modalidad de Ciencias, en la Facultad de Sociología y Ciencias Políticas, de la Universidad Complutense en el campus de Somosaguas. La prueba dio comienzo el lunes día 3 con las asignaturas de Lengua y Filosofía, de las que salió razonablemente contenta; por la tarde tuvo lugar Inglés, en el que la dificultad de la terminología y vocabulario fue considerable, impresión compartida por todos los compañeros y los docentes.

El siguiente examen fue el de Matemáticas II, el miércoles 5 de junio, para el que se había preparado concienzudamente sabiendo de la importancia de la asignatura ya que computa doblemente. La impresión fue de una dificultad muy superior a lo que se puede esperar de las exigencias del temario,problemas redactados de forma incomprensible, imposible encontrar la forma de resolverlo. Tras estudiar la viabilidad de las opciones se decantó por una de ellas.

En el desarrollo del examen, tenía a su alrededor a los compañeros con ruidos y gestos de desesperación, tras la media hora de obligatoria permanencia muchos estudiantes salieron del aula visiblemente preocupados, llorando, impotentes y rabiosos porque todo el esfuerzo que habían realizado no les ha servido de nada ante un examen casi imposible.

Al día siguiente realiza el examen de Biología, el que no le pareció nada fácil, aunque reconoce que tampoco le dedicó mucho tiempo. Por último, tenía la prueba de Química, en la que había dedicado mucho esfuerzo y dedicación, las esperanzas se fueron en el momento en que comenzó a leer los modelos de examen, tenían erratas y expresiones que no entendían ni los profesores de la materia.

Con todo esto quiero poner de manifiesto nuestro malestar por el desarrollo y ejecución de la prueba de forma injusta, arbitraria, poco profesional y pensamos que hasta con ulteriores intenciones que no podemos llegar a imaginar…

También es de reseñar que al comentar la dificultad de los exámenes con los compañeros de la rama de Sociales se lleva un mazazo importante al escuchar la diferencia en la dificultad de los mismos, tanto en Inglés como en Matemáticas afirman que son capaces de sacar hasta un 10. Hecho que todavía si cabe les hunde más en el desarrollo de los exámenes.

En cuanto al trato humano, podemos decir que ha sido nefasto. Negativas a contestar preguntas sin contenido académico, trato despreciable y hasta grosero. Un hecho sorprendente es que en el resto de las universidades les han dejado llevarse los exámenes y a ellos no, sin embargo, uno de los profesores que cuidaba su examen, nada más abrir el sobre se dedicaba a realizar fotografías de los mismos.

Para mi hija ha sido “la peor experiencia de su vida” y a pesar del apoyo recibido en la familia ha sido muy difícil dar explicación a los acontecimientos vividos en estos días.

La única intención de esta carta es poner de manifiesto un sentir de muchas familias que han sufrido en estos días como sus hijos después de haber tenido un curso dedicado única y exclusivamente a estudiar para sacar la “dichosa nota” y estudiar la carrera que les gusta han visto truncados sus sueños por la dificultad inusual y sin razón de los exámenes.

Estoy convencida que estos hechos pueden ser catalogados de discriminatorios, ya no solo con otras comunidades autónomas que es más que evidente, sino también dentro de la propia Comunidad de Madrid con los compañeros de la rama de Sociales. Estoy igualmente segura de que atenta directamente contra el principio de igualdad de oportunidades que tienen todos los españoles.

Ya no solo tenemos que aguantar que estudiantes de otras autonomías con pruebas de acceso más asequibles y con menos contenido opten a plazas universitarias de la Comunidad de Madrid, hecho que es cuestionable, también dentro de la misma Comunidad de Madrid hay un abismo entre la dificultad de los exámenes de una rama y otra.

Se me pasan por la cabeza en estos momentos muchas cosas, si esta situación está provocada por algún motivo, si pretenden bajar las medias que actualmente están por las nubes, si pretenden fomentar las universidades privadas que cada vez proliferan más, algún otro negocio o interés económico… pero lo que no puedo es callarme ante tales injusticias y desigualdades y que jueguen con el futuro de nuestros hijos, ¡ya esta bien!

Nunca he estado de acuerdo con este examen, pero ahora menos que nunca, los estudiantes no se pueden jugar el esfuerzo de varios años en un examen y todavía si fuera igual en toda España puedo llegar a entenderlo, por eso de la igualdad y solidaridad entre todos los españoles, que como principios inspiradores de nuestro estado democrático están cada vez más entredicho.

Animo a los poderes públicos a que regulen de una vez por todas este asunto y deje de ser una promesa electoral como tantas sin cumplir una y otra vez.