NFL

Los chicos de Alcobendas que juegan al «otro» fútbol

Los Royal Oaks Knights son referencia en las categorías formativas del fútbol americano en la región, un deporte que significa una oportunidad para formarse en EE.UU.

Como hacía la NBA hace un año con los Dallas Mavericks de Doncic –en partido no oficial– y hará la Fórmula 1 en 2026, la NFL (la competición más importante de fútbol americano) aterrizará en unos meses en Madrid, con el partido de liga regular –de los Miami Dolphins– que acogerá el Santiago Bernabéu. Sin embargo, más allá de la fiebre puntual que se desatará esos días, este deporte tiene desde hace años a cientos de fieles que practican este deporte en las ligas de la Comunidad de Madrid. En concreto, acompañamos al equipo sub-19 de los Royal Oaks Knights de Alcobendas en uno de sus entrenamientos. Su «head coach», el burgalés Marco Chomón, nos cuenta la historia de esta entidad: «Su origen es el resultado de la presencia de las primerascolonias estadounidense en España». Con los Pactos de Madrid en el 53, se firma la presencia de militares de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos en varias bases, entre ellas la de Torrejón de Ardoz. Con la presencia militar en las bases, llega un instituto, el Madrid High School que abre primero muy cerca de la Castellana y que posteriormente se traslada a la base de Torrejón de Ardoz. Los alumnos de ese instituto son los que empiezan a ser conocidos como los Knights desde la década de los 50. Tras la división del distrito escolar entre los alumnos que vivían en el entorno de la base y los que vivían en el Encinar de los Reyes, es decir, «Royal Oaks», nace el primer equipo de fútbol americano fuera del ámbito de las bases donde estaban los militares estadounidenses en España.

Sin embargo, Chomón aclara que hace ya mucho tiempo que los estadounidenses dejaron de copar las fichas de jugadores: «Hoy, la confección de nuestra plantilla responde a la diversidad de nuestra demografía. La gente cree que sigue jugando solo gente de ascendencia estadounidense, pero no es así. De hecho, la dirección migratoria se ha alternado. Nuestro equipo ha abierto las puertas de las universidades norteamericanas a muchos jóvenes madrileños, mediante acuerdos con entidades educativas y deportivas en Estados Unidos, para que tengan la oportunidad de completar su educación con una experiencia en un sistema educativo distinto. Es algo muy positivo para su desarrollo personal».

Llama la atención de que en la mayoría de web de los clubes españoles de que compiten en esta disciplina, predomina el idioma anglosajón, que a su vez, Chomón califica como «una de las principales barreras para que este deporte se haga masivo». «Nuestra comunicación parece requerir ser capaz de comprender previamente ciertas expresiones o conceptos anglosajones. Por eso, creo que tenemos que ser capaces de superar esta distancia desde los medios de comunicación, ya que son capaces de generar interés y crear fenómenos mediáticos. La gente suele acabar eligiendo lo que le presentan de una forma más accesible. Así, poco a poco se va creando una comunidad de seguimiento de promoción también a nivel formativo», añade.

Entre las imágenes que los españoles aglutinamos en nuestra memoria colectiva sobre este deporte, destaca la importante presencia de la tecnología, bien desde los sistemas de comunicación entre los cuerpos técnicos y desde hace bastantes años, siendo pioneros en el uso del videoarbitraje, lo cual también puede ser interpretada como un obstáculo para implementarlo en entidades educativas o deportivas modestas. Desde Royal Oaks Knights reconocen haber hecho un gran esfuerzo para ofrecer a sus jugadores un «feedback» tanto estadístico como audiovisual de sus actuaciones y estar así a la vanguardia de este deporte a nivel nacional, aunque no siempre se tengan los recursos óptimos. Pero a un ritmo aún mayor crece el nivel de la liga «gracias a la formación constante de los entrenadores», apunta Chomón. Así, «cada vez vemos fútbol de mayor calidad, con mayor preparación física, aplicando más esfuerzo, más interés y más recursos. Todo eso acaba resultando un deporte más atractivo».

La inclusión del «flag football» entre las disciplinas olímpicas de los próximos Juegos en Los Ángeles, reabre el eterno debate sobre el «excesivo» contacto físico de este deporte y las repercusiones que puede llegar a tener en la salud de los deportistas. Así, el flag football se abre camino como una alternativa menos lesiva y en el que pueden intervenir una mayor diversidad de deportistas. Sin embargo, este «head coach» rompe una lanza a favor de las actualizaciones que se han hecho en el reglamento y el equipamiento deportivo en las últimas décadas: «Celebro la presencia del flag football en los Juegos Olímpicos como vehículo para que nuestro deporte salga más allá de entidades como las nuestras. Pero a la vez, hay que reconocer que las reglas se han adaptado. Ya no jugamos con las mismas normas que hace décadas. Ahora se permite mucho menos contacto, incluso se podría decir que jugamos a un deporte totalmente distinto, un deporte mejor, más vistoso y con un componente atlético, táctico y de talento que es muy superior al que había entonces».

Sobre el «repentino» interés de la NFL por el mercado español y madrileño y viceversa, Chomón asegura que no es tan repentino: «La NFL lleva interesada hace años por la internacionalización de su competición. Ya es la liga deportiva más valiosa del mundo y que aglutina las marcas deportivas más valiosas del planeta, aun teniendo una presencia casi residual en el extranjero. Pero, se han dado cuenta de que el ancho mundo es también una fuente de recursos muy interesante». Pero estos partidos internacionales solo son una parte de la estrategia de la liga, así como el programa de participación de jugadores internacionales con plazas extra, que lleva ya en marcha unos 7 años y que está despertando un gran interés en las comunidades locales de esos deportistas. Además, la llegada de talento europeo a sus universidades está suponiendo «una revolución que hace 15 años era impensable».