La familia de Milena, asesinada presuntamente por su "sugar daddy", pide reabrir el caso

La familia de Milena Sánchez, la joven de 20 años presuntamente asesinada por su cliente Alfonso Fidel en Madrid, no cree la versión policial con la que se archivó el caso y pide que se reabra con nuevas pruebas que investiguen si la víctima pudo morir en un lugar distinto al piso del supuesto autor del crimen, donde fue hallada.

En un recurso de apelación al que ha tenido acceso Efe, la familia de la víctima reclama la reapertura del procedimiento, que se sobreseyó en un auto dictado por el Juzgado de Instrucción número 44 de Madrid el pasado 23 de mayo.

Entre otras aportaciones, adjuntan un informe elaborado por la agencia de investigación privada Descubro B2B, que posiciona el móvil de Milena la mañana del crimen, el día 22 de noviembre del pasado año, en la calle Segovia, cuando según la Policía fue grabada junto a Alfonso Fidel en las inmediaciones de la calle Atocha.

Como en ocasiones anteriores, la joven, que era explotada sexualmente, había quedado con este hombre de 53 años, uno de sus habituales clientes.

Después, siempre según la investigación policial, acudieron a un spa del centro, comieron y cogieron un taxi hacia el piso de Alfonso, ubicado en la calle Fray Luis de León de la capital, donde en ese tramo horario presuntamente asesinó a Milena en el marco de juegos sexuales de rol.

Cuatro días después, la expareja de Alfonso y un acompañante descubrieron el cadáver del varón en el interior del piso, donde se había suicidado, pero la Policía no encontró el cadáver de Milena hasta dos días más tarde, ya que estaba oculto en una pequeña habitación de la vivienda cerrada con candado.

Según la autopsia, la joven murió por asfixia mecánica, seguramente estrangulada, aunque también presentaba golpes y marcas en otras partes del cuerpo.

Por ese motivo, la familia de Milena tampoco entiende que en la supuesta escena del crimen no se pudieran recoger restos biológicos, principalmente sangre, de la víctima.

A fin de esclarecer si hubo terceras personas implicadas en los hechos y si la joven fue asesinada en otro lugar, la representación de la familia ha solicitado para reabrir el procedimiento una batería de pesquisas, entre ellas el cotejo de las muestras de ADN recogidas en el cadáver con el perfil genético de Alfonso