Finca Las Yeguas 2022: defender una variedad

En el abigarrado panorama enológico, cada vez apreciamos más la singularidad del vino. No sólo en cuanto a los paisajes, sino en la apología de las castas autóctonas. Bajo ese mandato, la familia bodeguera sevillana Salado proclama la defensa de la uva garrido fino en el entorno del Aljarafe. Elaboradores de vinos desde 1810, ahora en la sexta camada la que mantiene ese legado y esa tipicidad.

Esa variedad blanca sobre suelos marcadamente calcáreos, en una secuencia muy emparentada con la albariza jerezana, resume características notas de salinidad y muy buen volumen. Finca Las Yeguas 2022 es un atractivo ejemplar cuyo cuaderno de cata es de una notable bondad, incluso perfección tópica. No se puede sacar un defecto y hay que escribir en aquél los descriptores felices. Así, sobresalen sus argumentos cítricos, la untuosidad como rasgo, notas minerales y un resultado último para jugar con la gastronomía. Es un vino blanco que tiene un poquito de crianza, lo que concede equilibro y un poco más de estructura, al igual que las lías, pero sin tapar la realidad de ese varietal absolutamente directo. Pisar un campo en una parcela privilegiada, con un sueño que tiene que ver con esa Baja Andalucía de vinos cada vez más rompedores. beber y pensar. Más allá de las edades de la casa, lo importante es que se reivindique una uva y que exprese perfectamente lo que se relata.