Los mejores regalos gastronómicos para estas navidades

Si no han hecho todavía su carta a Santa Claus, la versión más estridente del bueno de San Nicolás, o confían en el buen criterio del barbudo, la labor de este escribiente es la de recomendarles, encarecidamente, que se decanten por pedir regalos gastronómicos. Nosotros le traemos experiencias de las que dejan contento el paladar y el alma, que pueden compartir con aquellos que más quieren y que son tan deliciosas que, créanme, no corren el riesgo de languidecer en ninguna estantería.

Empecemos por la comida. En estos días en los que las cenas en casa son un plan recurrente, nada mejor que quedar como un señor (o llevar como obsequio al anfitrión) alguna de las exquisiteces de Conservas José Peña, una conservera centenaria de Cambados con materias primas prémium, que cuida la calidad del producto y emplea las mismas recetas que usaba su fundador. Las sardinillas en aceite de oliva, procedentes de Rianxo y capturadas en su mejor momento, son una de las especialidades de la casa. Las empacan a mano, en abanico, tras un proceso de limpieza especialmente meticuloso. Disfrútenlas en el momento o guárdenlas, pues como los grandes vinos, mejoran y se confitan más en lata.

Indispensables, por supuesto, los ibéricos en cualquier bandejita que se precie. Salen buenos, muy buenos, los de Extrem Puro Extremadura. Para estas fechas, además, han sacado la colección Extremadura al plato, perfecta para regalar (o regalarse), concebida por el chef Toño Pérez (Atrio). Son elegantes platos y bandejas de cerámica artesana, inspirados en las cuatro ramas de la cocina extremeña (pastoril, monacal, de Alcántara y de Alentejo), que acompañará en unos elegantes cofres a sus productos 100 % ibéricos más emblemáticos. Darán que hablar a su cuñado por continente y contenido.

También es infalible el jamón (y el resto de delicias) de Cinco Jotas, marca de Jabugo que lleva haciéndonos felices desde 1879, y que ha hecho más por la gastronomía de este país que muchos de los que se cuelgan medallas a cada minuto en Instagram. Y para homenaje total, el jamón de la gama alta de COVAP, de bellota 100 % Ibérico bajo la D.O.P. Los Pedroches. Viene en una preciosa caja y se acompaña de uno de los grandísimos vinos de José Moro en Cepa 21, su Malabrigo 2019, además de cuchillo jamonero profesional. Todos ellos, con un platito al lado de los aceites espectaculares de Finca La Torre, son una fantasía, como dicen ahora los modernos.

Continuando con los vinos, hay sugerencias estupendas. En la mesa del humilde escribiente no suele faltar Barbazul, un vinazo que hace ya más de diez años abanderó la lucha enológica gaditana por demostrar que podían hacer tintos tranquilos de gran calidad. Pueden obtener ideas excelentes, y precios aún mejores, en la web de Vinoselección, el club de vinos más importante y antiguo de España. Es preciosa su Selección Thyssen Vinoselección, con vinos de grandes bodegas inspirados en los cuadros del museo homónimo. Aunque tampoco es mala idea dejarse llevar por nuestros apetitos y caprichos en Lavinia Ortega y Gasset, que cierra el 31 de enero. Cosas de los alquileres. Ya ven: intervenir no siempre soluciona las cosas. Más bien al contrario. Y para brindar al término de cada cena y festín, dos sugerencias de espumosos diferentes a los que solemos tomar. Uno es el Cuvée Privée de Monte la Reina, elaborado al 100 % con uva tinta de Toro sobremadurada y con 14 meses de reposo en barrica nueva de roble francés y del Cáucaso, dulzón y goloso. Y el otro, NOC Brut Prestige 2019, elaborado siguiendo el método tradicional y que combina chardonnay y viognier.

Y claro está, el dulce. Si les entusiasma el panettone, glorioso bollo que encandila y da un trabajo espantoso a los buenos artesanos que lo hacen, dirijan sus pasos hasta Marea Bread. Este minúsculo obrador de Sanchinarro, que ostenta el galardón del Mejor Pan de Madrid 2022, los elabora tan deliciosos como originales. ¿Sugerencia? El de algarroba, cacao, haba tonka y cuatro chocolates. Si son más de roscón, no se pierdan el de Robuchon, artesano, sin relleno, de nata o trufa, y que ya se puede disfrutar en el local, comprar en su obrador a partir del día 26 de diciembre o encargar si les puede la impaciencia. Y el bonus track: Relais & Châteaux tiene nuevos cofres regalo, bellísimamente presentados, con experiencias y estancias para dos personas en sus hoteles y restaurantes. Pueden darse una escapadita o disfrutar de las bondades de Coque y los hoteles Orfila y Heritage, que están en Madrid.