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Obras

Las obras «colchoneras» de la M-40 finalizan para el derbi

El Atlético de Madrid finaliza el último acceso que le quedaba para acceder al Metropolitano

MADRID.-El acceso que conectará el Riyadh Air Metropolitano con la M-40 abrirá al tráfico en la madrugada del viernes al sábado EUROPAPRESS

En las últimas semanas, los conductores que transitaban a diario por la M-40 lo notaban: las obras de adecuación de la autopista de circunvalación parecían tocar a su fin. Quedaba un remate: el paso inferior de dos carriles, bajo la rotonda de la avenida de Arcentales, justo frente al Riyadh Air Metropolitano, en dirección sur. Era el último acceso al estadio colchonero pendiente de concluirse. Finalmente, estará abierto en la madrugada del viernes al sábado, justo para el derbi que disputan Atlético de Madrid y Real Madrid. A partir de ahí, y como explicaban desde el Ayuntamiento de Madrid, los vecinos de la zona contarán con una conexión más eficiente y segura, viendo ampliadas sus opciones diarias de movilidad para circular de una manera más ágil y fluida.

Así culmina la parte colchonera de las obras del entorno del Metropolitano. Un proyecto que echó a andar en julio de 2024, cuando José Luis Martínez-Almeida y el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, inauguraban en el entonces Civitas Metropolitano las obras de la futura Ciudad del Deporte del equipo. Se iniciaba entonces el proyecto acordado entre Cibeles y el club dos años antes. Enmarcado como una colaboración público-privada impulsada por el Ayuntamiento, el Gobierno local cedía cinco parcelas del entorno del estadio al club –unos 265.000 metros cuadrados en total– en las cuales, además de las nuevas instalaciones deportivas, se construirán dotaciones municipales tales como una pista de atletismo, dos campos de fútbol 11, cuatro pistas polideportivas cubiertas y cuatro pistas de pádel. Todo ello será costeado y construido por el Atlético de Madrid, con un presupuesto de 300 millones de euros.

Dentro del proyecto, y previamente a la construcción de la nueva Ciudad del Deporte, la primera iniciativa era la creación de nuevos accesos desde la M-40. Una demanda vecinal histórica del distrito de San Blas-Canillejas. Además de mejorar la salida de coches y autobuses al finalizar los partidos, conciertos y otros eventos multitudinarios que acoge el estadio, también contribuirá a descongestionar la zona y facilitar la movilidad de los vecinos en las inmediaciones. Para ello, el club se comprometía a destinar 30 millones de euros.

Tal y como adelantó el pasado abril LA RAZÓN, las obras ahora concluidas deberían haber finalizado varios meses antes: a finales de 2024. Sin embargo, surgió un obstáculo ajeno al Ayuntamiento y al club colchonero: los propietarios del suelo de la Nueva Centralidad del Este –uno de los nuevos desarrollos planificados en la ciudad– solicitaron la colocación de dos torres de alta tensión. Una gestión que el Ayuntamiento solventó, pero que requería autorización de la Comunidad de Madrid por parte de la compañía eléctrica para soterrar el tendido. Eso provocó, como informó este diario, que las obras de los nuevos accesos, avanzadas entonces en un 95 %, se quedaran estancadas.

Como señalan desde Obras y Equipamientos, el club ha ejecutado la vía de servicio desde la M-40 norte hacia las parcelas de la Ciudad del Deporte, que desemboca en los accesos de la salida 9A (avenida de Luis Aragonés) y la salida 9B (avenida de Arcentales-Coslada). Estos accesos son los que utilizan actualmente los vehículos que se dirigen a los distintos aparcamientos del estadio y constituyen la principal vía de entrada al barrio de Las Rosas y Las Musas.

De este modo, culmina un proceso, el de los accesos al nuevo estadio, que comenzó en 2017 con la ejecución de los dos ramales de acceso al ámbito desde la M-40, condición indispensable para poder poner en funcionamiento el estadio y no saturar el tráfico en la zona.

Para verano de 2026

El pasado mayo, el Ayuntamiento confirmaba que la Ciudad del Deporte abrirá sus puertas en el verano de 2026. Los primeros trabajos fueron los de movimiento de tierras, paso imprescindible para la ejecución de los nuevos equipamientos.

En la primera parcela se levantará una pista de atletismo de ocho calles, con capacidad para campeonatos oficiales. Su parte central acogerá un campo de fútbol 11 divisible en dos de fútbol 7. En esa misma parcela se construirá un campo adicional de fútbol 11, otro de fútbol 7 y una pista cubierta de calentamiento de atletismo de 110 metros. La segunda parcela contará con cuatro pistas cubiertas para la práctica de deportes de equipo como balonmano, fútbol sala o voleibol.