Sucesos
Los padres de la niña fallecida en la piscina de un colegio de Alcorcón: "Noelia pasó muchos minutos bajo el agua"
Denuncian "negligencia y falta de trasparencia del colegio" que "no cuidó" a su hija de cuatro años
La tragedia golpeó con fuerza el pasado mes de junio a una familia del Colegio Villalkor, donde Noelia, una niña de tan solo 4 años, perdió la vida en la piscina cubierta del centro durante una actividad lectiva. A las 11:30 de la mañana, mientras la menor participaba en una actividad supervisada en la piscina, el personal responsable no advirtió que Noelia estaba bajo el agua. Tras un tiempo crítico en el que, según sus padres, nadie detectó su situación, Noelia falleció. Hoy, sus progenitores rompen su silencio, asegurando que "no fue un accidente, sino una negligencia".
Los padres de la pequeña Noelia han decidido hacer pública su versión de los hechos en un comunicado en el que destacan que, además del dolor profundo por la pérdida de su hija, sienten una profunda indignación ante lo que consideran una "falta de humanidad y transparencia por parte del colegio".
"Sentimos el dolor más inmenso que puede sentir cualquier persona humana al perder a un hijo", declaran los padres, quienes aseguran que, lejos de recibir explicaciones o muestras de empatía por parte del centro, han presenciado una actitud que perciben como indiferente y orientada solo a proteger la imagen pública del colegio. "Solamente se han dedicado a limpiar su imagen públicamente", afirman, criticando la diferencia entre las publicaciones oficiales del colegio en redes sociales y la falta de comunicación en privado.
El relato de los padres es claro: "Noelia no sufrió un accidente, ni se dio ningún golpe, ni había colchonetas; a Noelia no la cuidaron". Según sostienen, "nuestra niña pasó muchos minutos debajo del agua y esa es la verdad", lo que califican como una negligencia grave. Se preguntan dónde estaban los responsables de vigilar a los menores y por qué nadie advirtió la situación a tiempo para evitar el desenlace fatal.
Actualmente, las personas implicadas en el suceso están imputadas por el Juzgado de Instrucción por un delito de homicidio por imprudencia grave. Sin embargo, según los padres, "estas personas siguen trabajando en el mismo sitio, en el colegio Villalkor", lo que consideran un motivo de indignación y alarma.
Con un proceso judicial en marcha, la familia espera que la Justicia determine las responsabilidades pertinentes, para que se reconozca y se actúe en consecuencia con la magnitud de la tragedia que enfrentan. "¿Hay algo más grave que la pérdida de la vida de una niña en un centro educativo por una imprudencia perfectamente evitable?", se preguntan, señalando que, además del procedimiento penal, su exigencia de justicia es también un acto de memoria hacia Noelia, quien "un día se fue al cole y ya nunca volvió a casa".
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