El uso del transporte público en Madrid se acelera en junio

El Instituto Nacional de Estadística publicaba ayer los datos del tráfico de pasajeros, en junio, del transporte público a nivel nacional, mostrando un importante crecimiento general y en la ciudad de Madrid. Esta incremento se produce después de que esta clase de movilidad tocase fondo con las restricciones de la pandemia. Todo apunta a que la recuperación de la plena normalidad y la eliminación de restricciones, como el uso de mascarilla, han invitado a los ciudadanos a utilizar con más frecuencia el Metro o el autobús. También a nivel nacional, como cada año, se ha detectado un descenso respecto al mes de mayo, aunque en este caso ha sido menos pronunciado que en 2022. Esta reducción respecto a su mes predecesor se debe, en parte, al cierre de colegios y el fin de las clases en la Universidad o los cambios en los hábitos laborales. Cada vez, más empleados cuentan con la flexibilidad de poder teletrabajar en cuanto se aproximan las fechas estivales.

Madrid es una de las grandes impulsoras de este crecimiento generalizado, tanto en Metro como autobús. El número de pasajeros que optaron por utilizar el Metro para sus desplazamientos experimentó un aumento del 18,4%. De manera similar, aquellos que eligieron los autobuses operados por la Empresa Municipal de Transporte (EMT) en la capital experimentaron un incremento promedio del 23,3% durante el mes de junio en comparación con el mismo mes del año 2022, según revelan los datos divulgados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En concreto, los autobuses de la EMT en la capital registraron un total de 40 millones de pasajeros en el mes de junio, mientras que en el sistema de Metro de Madrid, aproximadamente 57 millones de pasajeros utilizaron el servicio de metro durante el mismo período.

A nivel global, en la Comunidad de Madrid, la cantidad de viajeros que utilizaron los autobuses en junio ascendió a 46,2 millones, lo que representa un incremento del 23,4% en comparación con el mismo mes del año anterior. En lo que va de año, el promedio de crecimiento del transporte urbano en dicha región se ha situado en un 20,1% de media.

El Director Gerente de CRTM Pablo Rodríguez Sardinero ha analizado estos datos para LA RAZÓN, más allá de la frialdad de los números: «No voy a decir que las cifras nos sorprendan. El Consorcio Regional de Transportes de Madrid mide rigurosamente y por diferentes métricas, incluyendo la minería de datos, el uso que hacemos de los diferentes modos de transporte, así como su impacto positivo en cuanto a la sostenibilidad y el medio ambiente. Tampoco vamos a engañarnos, el precio, altamente subvencionado, propicia esa migración hacia el transporte público. Pero el viajero que viene por el precio se fideliza por la calidad del servicio. Hace unos días supimos que la encuesta de Percepción de Calidad en Metro ha superado por primera vez el 8, la más alta desde que, en 1993, se empezara a desarrollar esta encuesta». Aun así, recalca que «nuestro modelo no es competitivo, sino colaborativo, buscando mediante la coordinación que nadie se sienta lejos de su propia casa».

A escala nacional

Con todo esto, Madrid no ha sido la ciudad cuyo transporte público ha crecido más en junio respecto a 2022. Las intensas campañas para fomentar el transporte público y su accesibilidad, coincidiendo en plena campaña electoral, parece que han surtido efecto entre la población española. En el mes de junio, más de 450,7 millones de pasajeros optaron por el transporte público, lo cual representa un incremento notable del 18,3% en comparación con el mismo período del año 2022. En términos anuales, el transporte urbano experimentó un aumento del 21,7%, mientras que el interurbano mostró un incremento del 18,5%. Es particularmente destacable el aumento del 22,3% en el transporte ferroviario dentro del ámbito interurbano. La variación mensual del número de pasajeros en el transporte público de junio en relación a mayo se sitúa en torno a un -3,7%, lo que supone un descenso más suave que en 2022.

Sobre el transporte urbano, más de 273,1 millones de viajeros optaron por esta modalidad en junio, lo que representa un aumento significativo del 21,7% respecto al mismo mes del año anterior. El uso del metro aumentó en un 19,8% en términos anuales. Dentro de este contexto, el metro de Málaga experimentó el mayor incremento, alcanzando el 111,1%, mientras que el de Bilbao mostró un incremento menor del 15,8%. En ciudades con sistemas de metro, el mayor aumento en el transporte por autobús se observó en Palma (45,7%), mientras que Sevilla no tuvo variación. En este apartado Madrid supera en más de 3 puntos la media nacional de crecimiento, aunque por detrás de Málaga, Palma y Valencia, las tres que más aumentaron.

En el caso del transporte urbano por autobús, se registró un aumento del 23,0% en junio en comparación con el mismo mes de 2022. Todas las regiones autónomas presentaron tasas anuales positivas en este tipo de transporte. Los mayores incrementos se observaron en Canarias (46,2%), Región de Murcia (30,7%) y Comunidad Valenciana (30,3%). Por otro lado, Andalucía (15,8%), Aragón (16,5%) y Cataluña (16,7%) mostraron los menores incrementos en el transporte por autobús. A diferencia del Metro, en este caso las cifras se estudian por comunidades autónomas. La Comunidad de Madrid, prácticamente marca el nivel de crecimiento medio de toda España, superando solo en cuatro décimas esta mediaa nivel nacional (23,0%).

Con respecto al transporte interurbano, más de 129,3 millones de personas eligieron esta opción en junio, lo que indica un aumento del 18,5% en comparación con el mismo mes del año anterior. Por modalidad de transporte, el ferrocarril experimentó un crecimiento del 22,3%, el autobús un 16,5%, el transporte aéreo un 6,9% y el marítimo un 2,4%. Dentro del transporte interurbano, el sistema de Cercanías mostró un incremento del 13,2% en el transporte por autobús y un 20,0% en el transporte por ferrocarril. En términos de distancias, el transporte en media distancia aumentó un 24,6% por autobús y un 57,3% por ferrocarril, mientras que la larga distancia creció un 27,2% en el transporte por autobús y un 22,7% en el ferrocarril. En este último caso, el segmento de Alta Velocidad vivió un aumento del 34,3%. Esto se explica por la intensa campaña de reducción de tarifas, especialmente para jóvenes, que anteriormente era el segmento poblacional que más rechazaba esta vía por cuestiones de presupuesto.

El precio, la clave de Ayuso

La Comunidad de Madrid ha apostado, nada más estrenar nueva legislatura de Ayuso por mayoría absoluta, por mantener la reducción del 60% en el coste de los abonos mensuales de transporte público. Esta resolución fue tomada durante la reunión del Consejo de Administración del Consorcio Regional de Transportes (CRTM) celebrada, precisamente, a finales de junio. Allí se acordó extender la rebaja del 50% en el precio de los títulos de 10 viajes, tal como ya había anunciado la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, durante el Debate de Investidura. Ambas medidas, que están en vigor desde el 1 de febrero, afectan a los siete millones de usuarios madrileños, lo que se estima como un ahorro colectivo de 30 millones de euros cada mes.

De acuerdo con el acuerdo alcanzado, el abono Joven 30 días, diseñado para menores de 26 años, continuaba costando 8 euros. Por su parte, el abono normal A se mantenía en 21,8 euros, el B1 en 25,4 euros, el B2 en 28,8 euros y la zona unificada B3-C1/C2 se conservaba en 32,8 euros. En todos estos títulos, se mantuvieron también los descuentos para familias numerosas de categoría general (20%) y especial (50%), así como para personas con un grado de discapacidad igual o superior al 65% (20%). Los niños de entre 4 y 6 años que usan la Tarjeta de Transporte Público (TTP) infantil, que significan más de 65.000 usuarios, seguirán viajando de forma gratuita, al igual que las personas de 65 años o más. Estas tarifas se mantendrán sin cambios a lo largo de todo el año. Pero más allá de la política de precios, la Comunidad de Madrid ya comunicó los planes de reforma que ya tenía ideados desde la anterior legislatura. Entre ellos destaca la ampliación de la Línea 11, a la altura de Atocha, y la transformación del homenaje a las víctimas del atentado del 11-M.