Coronavirus

León

Un león se cuela en el embarque de un aeropuerto vacío por el coronavirus

El animal salvaje se recostó en un aeródromo de Kenia en busca de una sombra para resguardarse

Un león recostado en el aeródromo de Musiara, Kenia
Un león recostado en el aeródromo de Musiara, KeniaImágenes cedidas por el equipo de grabación de la serie documental ‘El rey de la sabana’. Autoría: Sergio Acero / Regis Francisco Lópe

Mientras que los humanos estamos confinados entre cuatro paredes a causa del COVID-19, los animales en libertad campan a sus anchas por multitud de lugares hasta ahora impensables para ellos. Ayer un león africano llegó hasta el aeropuerto de Musiara en Kenia, y se coló por los espacios reservados a los pasajeros con total normalidad. A primera hora de la mañana el aeródromo amaneció con el félido deambulando por los espacios solitarios del recinto a causa del coronavirus.

En una imagen que nunca se ha visto hasta hora, el león, al parecer en busca de una sombra en la que cobijarse, llegó hasta la zona de embarque del aeródromo ahora cerrado tras la cancelación de todos los vuelos a causa del estado de confinamiento mundial para frenar la extensión del coronavirus.

El animal no dudó en tumbarse y relajarse en las instalaciones aeroportuarias. “Es una estampa que no he visto nunca en los 30 años de vida”, asegura Benson Ole Muli, un habitante masai que contemplaba ayer atónito la escena.

La imagen ha sido filmada por el equipo de españoles que grababa la serie documental ‘El rey de la sabana’, una producción con imágenes inéditas sobre el comportamiento, a veces inusual, de grandes depredadores como el león, y que a causa del confinamiento se ha quedado bloqueado en el país africano.

Junto a ellos viaja Jorge Alesanco, un naturalista español que se ha convertido en la primera persona que consigue integrarse en una manada de leones como un miembro más. “Es una imagen completamente inusual, los leones habitualmente no suelen adentrarse en territorios frecuentados por hombres”, afirma Jorge, que ha establecido una relación muy estrecha con los leones.

Desde que se declaró el estado de alarma en España el pasado 13 de marzo, no es extraño ver por las ciudades animales como jabalíes, corzos, patos o pavos reales. Por las redes sociales es habitual encontrar mensajes con imágenes de ciudadanos que han avistado algún animal en núcleos urbanos o lugares donde su presencia era casi imposible antes de que España se viera afectada por el covid-19.

Pavos reales en los alrededores del parque de El Retiro, jabalís por las calles de Barcelona de Madrid, cabras sueltas por el municipio de Chinchilla (Albacete), patos silvestres en las fuentes de Roma o delfines nadando en los canales de Venecia, son algunas de las imágenes que la gente comparte en sus redes sociales.

Pero nada como un león en pleno aeropuerto como el que ayer decidió ir hasta la zona de pasajeros, eso sí sin tarjeta de embarque y sin pasaporte y en un aeródromo africano que está algo más cerca de la selva que los nuestros de Barajas o El Prat.