Medicina sostenible: el cortometraje que convierte los números en personas

Marc tiene una enfermedad cardiovascular que podría causarle un ataque al corazón en cualquier momento. Se ha prestado voluntario para probar un nuevo fármaco experimental que puede mejorar su vida. Además, el corazón le duele por otros motivos: está enamorado de Lucía, una camarera. Como cada día, acude al establecimiento donde trabaja ella, dispuesto a confesarle su amor. Lo que no sabe es que en la mesa de al lado se sienta Javier, un científico que trabaja en el desarrollo del medicamento que podría salvarle la vida. ¿El problema? Que el investigador también ama a la mujer que les sirve el café.

Esta es la sinopsis de «El mismo día, a la misma hora», un cortometraje en el que los números se convierten en personas. Se trata de una iniciativa pionera en el sector farmacéutico, a través de la cual Novartis España presentó los datos anuales sobre el impacto social, ambiental y económico (estudio SEE, por sus siglás en inglés) de su actividad en España, el año pasado. Y ayer Novartis lo volvió a hacer.

Por segundo año consecutivo, la farmacéutica publicó los resultados de su estudio SEE (pertenecientes, en este caso, al año 2020) a través del estreno de la segunda parte de «El mismo día, a la misma hora». En la propia producción audiovisual se introducen algunas cifras de la huella que deja Novartis en nuestro país. Y así, por ejemplo, la producción audiovisual revela que el análisis de 103 medicamentos reflejó un beneficio directo para los pacientes de 147.390 años de calidad de vida respecto al tratamiento estándar.

Estos cerca de 10 millones de pacientes que se han beneficiado del portfolio de medicamentos de Novartis en España, lo han hecho a través de tratamientos procedentes de distintas áreas como oncología, cardiovascular, neurología, o respiratoria. Si midiéramos este impacto social sobre pacientes y sociedad en términos económicos, ascendería a 4.903 millones de euros, según el estudio SEE 2020. La cifra es 4,37 veces mayor que el impacto que Novartis tiene en la economía española a través de su contribución al PIB. Además, se ha superado en cerca de un 3% el impacto social que se obtuvo en el ejercicio de 2019.

Pero la compañía no se queda ahí. «Más allá de cifras económicas, es relevante poner estos números en perspectiva en un momento en el que tuvimos que aprender a distanciarnos socialmente para asegurar nuestra salud y, por tanto, muestras de cariño como los abrazos también quedaron limitados», afirma Jesús Ponce, presidente de Novartis. Distintos estudios afirman que necesitamos un mínimo de cuatro abrazos al día para sobrevivir y mejorar nuestro bienestar. «Por tanto, si traducimos el impacto social de nuestros tratamientos en España, podemos decir que gracias a la ciencia y al apoyo a la investigación, permitimos a las personas y a sus familias disfrutar de 215 millones más de abrazos al año», declara.

Esta cifra también aparece en la segunda entrega de «El mismo día, a la misma hora», una historia de amor que, además de apoyar al sector cultural en tiempos difíciles, plasma un informe de resultados en un formato disruptivo e innovador. La creación de esta cinta se enmarca en «La Huella by Novartis», una iniciativa con la que la farmacéutica «da un paso al frente en transparencia». Esta idea «surge de una reflexión profunda sobre la necesidad de presentar nuestro impacto de una manera diferente», explica el presidente. Su objetivo es «mostrar el compromiso social de la compañía e impulsar la responsabilidad compartida y el diálogo abierto con la sociedad».

Farmacéutica verde y limpia

Ante un escenario caracterizado por importantes desafíos globales como la búsqueda de soluciones para combatir la Covid-19, la lucha contra el cambio climático o la cronificación de las enfermedades, cada vez es más claro que las empresas deben repensar cómo miden su éxito. Hasta ahora, las compañías hablaban de su contribución a la economía y de creación de empleo. Sin embargo, cada vez surgen más iniciativas como «La Huella by Novartis», que repiensan su informe anual más allá del ámbito económico y añaden otros valores como el impacto social o el ambiental.

En este sentido, Novartis adquirió en 2020 una serie de compromisos medioambientales a nivel global. En primer lugar, lograr la huella de carbono neutral en sus operaciones para 2025 y en toda la cadena de valor (producción y distribución) para 2030. Así mismo, prometieron reducir el consumo de agua un 50% en sus operaciones para el año 2025 y alcanzar la neutralidad en el consumo de agua para 2030. Por último, la farmacéutica también se fijó la neutralidad en el uso de plásticos y asegurar que sus productos incorporen principios de ecodiseño para 2030.

Pues bien, en la consecución de estos objetivos desde España, este año Novartis ha conseguido reducir el consumo de energía un 21%; el consumo de agua un 28%; la huella de carbono un 22%; y reducir los residuos no reciclados en un 45%. Así mismo, a nivel interno Novartis cuenta con un equipo formado colaboradores de distintas distintas áreas que han bautizado como «EcoGreen Team», y que con sus aportaciones permite idear y poner en marcha planes de acción para alcanzar objetivos verdes.

Fruto de este equipo nacen programas como «0 printing» para no imprimir ningún material promocional y el programa «Plastic Free» para contribuir a la eliminación de residuos plásticos e incrementar el aprovechamiento de los materiales, consiguiendo así eliminar cerca de 1,5 millones de objetos o utensilios plásticos de sus centros de trabajo en España en 2020.

También, a finales de 2020, la compañía anunció la firma de distintos acuerdos de compraventa de energía virtual con tres proveedores energéticos (Acciona, EDP Renewables y Enel Green Power), que aportarán al sistema eléctrico más de 275 megavatios de energía limpia generados en España en plantas solares y parques eólicos de nueva construcción. Esta iniciativa convierte a Novartis en la primera farmacéutica que se dispone a alcanzar un 100% de energía renovable en sus operaciones europeas a través de acuerdos de energía virtual.

En resumen, en base a la metodología aplicada en el estudio SEE 2020, el valor global neto de la compañía en España en 2020 asciende a 4.768 millones de euros (1.122 millones de euros de contribución al PIB, 4.903 millones de impacto social de medicamentos y un millón de euros de capital humano a los que hay que restar 70 millones de euros de impacto medioambiental y 1.187 millones de ventas netas), lo que representa un incremento del 3% respecto al ejercicio SEE 2019.

Novartis quiere, en definitiva, «dar un paso al frente en este camino de construir confianza con la sociedad», asegura Ponce. Y es que, el informe SEE de Novartis va más allá del ámbito económico. La norma general es otra: «Normalmente, solo se presentan ventas y empleos», expone el presidente del grupo en España. Pero el estudio SEE de Novartis es, por el contrario, «más sólido, fiable y con una metodología validada con el sello de la OCDE».

Los resultados obtenidos en el ejercicio 2020 permitirán «destinar más recursos económicos a aquellas actividades que generan un impacto positivo y real en la sociedad, creando así un nuevo paradigma respecto a los criterios a tener en cuenta en la toma de decisiones de las compañías», asegura.