Acción climática para detener el calentamiento global

El Grupo Red Eléctrica ha anunciado esta semana su objetivo de disminuir en 2030 un 55 por ciento sus emisiones directas y un 28 las relacionadas con su cadena de suministro, con respecto a 2019. Con ello, la compañía, responsable del transporte de la energía eléctrica desde los puntos de generación y de la operación del sistema eléctrico, se propone un aumento al alza su acción climática para ajustarla al escenario más ambicioso del Acuerdo de París; es decir, limitar el aumento de la temperatura del planeta a 1,5° C respecto la era preindustrial y alcanzar las cero emisiones netas para 2050.

«La crisis del clima requiere de empresas activamente comprometidas con la transición ecológica y a la altura de las expectativas y exigencias que el reto conlleva, ha declarado Beatriz Corredor, presidenta del Grupo Red Eléctrica, que añade «Así lo entendemos en Red Eléctrica, como compañía que busca tener un impacto social y medioambiental positivo, y como agente clave en el cambio hacia un nuevo modelo energético cuyos elementos centrales serán la electrificación de la economía, la máxima integración de energías renovables y la eficiencia energética», sostiene Beatriz Corredor. Y añade: «Detener el aumento aumento de temperatura exige actuar de forma urgente para compatibilizar el crecimiento y el bienestar económico con la reducción de emisiones, y esto solo será posible con un modelo energético que suministre energía asequible y no contaminante para todos».

Para alcanzar ambos objetivos Red Eléctrica trabajará en las áreas de alcance 1, 2 y 3, según el GHG Protocol, (Protocolo de Gases de Efecto Invernadero), la herramienta internacional más utilizada para el cálculo y comunicación del Inventario de GEI, que clasifica las emisiones en tres grupos o alcances.

En el 1, que engloba las emisiones directas generadas por las entidades en sus fuentes propias o controladas, en el caso de Red Eléctrica «están contempladas las de SF6, hexafluoruro de azufre, un gas que actúa como aislante y que está presente en los interruptores y en las subestaciones blindadas. Tiene dos características: una que tiene un potencial de calentamiento global muy alto; la otra es que actualmente no hay alternativa viable. Por tanto, no podemos eliminarlo, pero sí actuar en la gestión de las instalaciones para reducir las pérdidas:, mejorar los métodos de detección y corrección de fugas, repararlas, renovarlas etc.», explica Mercedes Vázquez, experta en cambio climático del equipo de Sostenibilidad del Grupo Red Eléctrica.

En cuanto a las emisiones de alcance 3, «que incluye hasta 15 epígrafes, desde los viajes hasta la gestión de residuos, las más importantes en el caso de Red Eléctrica son las que se refieren a la cadena de suministro, las que generan los proveedores de todo tipo que tiene la compañía. Esa parte supone hasta el 90 por ciento del este alcance».

Para reducir el 28 por ciento de emisiones previsto en este capítulo, «se ha hecho un diagnóstico y vamos a focalizarnos, sobre todo, en los proveedores más intensivos en emisiones y en los más trabajan para nosotros, que son los que tienen más peso en términos de emisiones La mayoría son empresas grandes que proporcionan equipos importantes como transformadores o interruptores , empresas que prestan servicios relacionados con la construcción de subestaciones u otros servicios relevantes.

La vía para cumplir el objetivo en el alcance 3 es doble, «el primero, la reducción en sí misma y el segundo es la palanca para conseguirla: que los proveedores responsables de dos tercios de esas emisiones incluyan en sus prácticas de negocio objetivos SBTi, (Iniciativas Basadas en la Ciencia, en sus siglas en inglés), de manera que tengan unos objetivos de reducción validados, como los nuestros». Para ello, la compañía ampliará la línea de apoyo que ya viene prestando a sus proveedores para que aumenten el conocimiento de su impacto e identifiquen y apliquen mejoras para reducirlos. «En algunos casos puede llegar a ser necesario rediseñar los equipos, aplicando criterios de ecodiseño. Porque determinados factores, como el consumo o las emisiones generadas en su ciclo de vida por ejemplo, hay que considerarlos desde el inicio, ya que no se pueden cambiar sino que requieren otras soluciones tecnológicas y alternativas», detalla Vázquez. En todo caso el esfuerzo para alcanzar este objetivo «requerirá avanzar con cada proveedor en función de sus necesidades. Porque hay algunos que tienen ya implantadas unas políticas climáticas muy potentes y otros que tienen más camino por recorrer».