Los hábitos ciudadanos se adaptan a la sequía y al coste de los suministros

El 100% de los encuestados afirma que en su trabajo bebe de una botella reutilizable en lugar de optar por una de plástico, se ducha en lugar de bañarse y evita descongelar alimentos con agua caliente.

La última encuesta del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) revelaba que casi el 90% de españoles está muy o bastante preocupado por la sequía. A pesar del aumento de precipitaciones del final de la primavera, no se ha revertido la mala situación de las reservas hídricas y el problema continúa en varios territorios de España. Según el informe mensual de la situación de sequía que elabora el Ministerio para la Transición Ecológica, el 39,9% de la superficie del país está en alerta o emergencia por escasez coyuntural de agua. Frente a esta situación, son muchos los ciudadanos que han modificado sus hábitos para ahorrar agua.

El III Barómetro de Conductas Sostenibles de Aqualia, elaborado a partir de los datos extraídos del Sosteniblómetro, revela que hay gestos relacionados con el uso responsable del agua que ya están muy implementados en la vida diaria de los ciudadanos. Es el caso de optar por ducharse en lugar de bañarse, un hábito que aplica del 100% de las personas consultadas (un 5% más que en la consulta anterior de diciembre de 2022).

También todos los usuarios afirmaron sacar los alimentos del congelador con tiempo para evitar descongelar con agua caliente y optar por llevar al trabajo una botella de agua reutilizable en lugar de beber de una de plástico. Más del 92% de las personas que participaron en el Sosteniblómetro afirmaron también cerrar el grifo de la ducha mientras se enjabonan.

No obstante, la preocupación por controlar el consumo de agua en el actual momento de sequía no es la única razón que influye en la modificación de los hábitos de la población.

Energía y alimentos

Los elevados costes energéticos demuestran una vez más no ser solo una preocupación para las industrias, sino también para los ciudadanos de a pie. Esta sensibilidad al coste de los suministros se palpa en otros hábitos con amplia aceptación entre los ciudadanos. El 100% de los participantes consultados afirmó que procura tener las ventanas y puertas bien cerradas cuando enciende la calefacción (superando en más de un 5% la consulta anterior). También cuentan con este porcentaje hábitos relacionados con los alimentación, como comprar lo justo y necesario para evitar el despilfarro de comida y guardar el alimento sobrante en el frigorífico para consumirlo otro día. Otro de los gestos que implementa el 100% de los consultados tiene relación tanto con el ahorro de agua como con el ahorro de energía, y es el poner a secar la toalla con la que se han duchado en lugar de echarla a lavar al primer uso.

El III Barómetro de Conductas Sostenibles de Aqualia también revela hábitos que tienen todavía margen de mejora. La mayor parte de ellos tiene que ver el consumo de determinados productos en su versión más sostenible. Solo el 35,71% de encuestados afirman que al comprar detergente para lavadora tienen en cuenta que sea ecológico, los mismos que afirman utilizar cepillo de dientes de bambú o madera en lugar de los de plástico. Solo el 25% han comprado alguna vez en tiendas de residuo cero en las que rellenar su propio recipiente con el producto que se desea comprar, y la misma proporción de participantes utiliza productos con etiqueta eco o bio para su higiene personal.

Por qué necesitamos comunicar sobre sostenibilidad

El Sosteniblómetro es una herramienta que invita a realizar un test con cinco sencillas preguntas a través del cual el usuario puede medir cómo de sostenible es en su día a día. El resultado obtenido es una propuesta a reflexionar sobre qué corregir y cómo hacerlo, y ofrece consejos sostenibles para mejorar en los hábitos diarios. «Nos sentimos con la responsabilidad de compartir nuestro conocimiento, formar y concienciar a la sociedad acerca del uso y cuidado del agua» afirma Juan Pablo Merino, director de Comunicación y Sostenibilidad de Aqualia, respecto a esta acción educativa.

El conjunto de resultados del Sosteniblómetro nutre al Barómetro de Conductas Sostenibles de Aqualia, que expone aquellas acciones que la ciudadanía tiene más o menos adquiridas en su vida cotidiana en cuanto a hábitos responsables y sostenibles. «Nuestros mensajes tienen un enfoque pedagógico para poner en valor la gestión del agua, que muchas veces parece invisible», destaca Merino, que resalta la «importante y estrecha relación entre la comunicación y la sostenibilidad».

El III Barómetro de Conductas Sostenibles de Aqualia mide, a través de un test, la sostenibilidad de distintos hábitos cotidianos y revela que las prácticas más extendidas son el ahorro de agua y de energía.