Temerario es el tercer integrante de la gama híbrida de Lamborghini, sucesor del mítico Huracán que, como todos los modelos de la marca italiana, une a su espectacular diseño una alta tecnología fruto de su pertenencia al grupo VAG y unas prestaciones que le colocan en la élite de los automóviles deportivos. Una marca que, como ya manifestó en público, no le gusta al presidente Sánchez, pero que incrementa sus ventas. En el pasado año Lamborghini vendió 10.687 unidades en todo el mundo, 71 de ellas en España.

Este dos plazas, definido por la marca con las siglas HPEV (High Performance Electrified Vehicle) destaca por su nuevo diseño y por su innovador sistema de propulsión, que combina el motor V8 biturbo con tres motores eléctricos para ofrecer una potencia combinada de 920 caballos. El V8, diseñado y desarrollado desde cero, supone una innovación tecnológica, ya que se trata del primer motor de superdeportivo capaz de alcanzar las diez mil revoluciones por minuto.

Gracias a la hibridación el Temerario alcanza una velocidad máxima superior a los 340 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 2,7 segundos. Su nuevo chasis de aluminio aumenta la rigidez torsional y garantiza una excelente dinámica de conducción y además se ha incrementado el espacio tanto para sus pasajeros como para su equipaje, ya que puede llevar dos maletas de tamaño medio bajo el capó delantero.

Al volante, el piloto cuenta con varios modos de conducción, que dosifican la deportividad ya sea en carretera o en una pista, como se espera de un auténtico Lamborghini. La carga aerodinámica se ha incrementado un 103% en el eje trasero con respecto al Huracán, y de forma opcional dispone del paquete de material aligerado que reduce el peso del vehículo hasta en 25 kilogramos gracias a la utilización de elementos más ligeros. Cada modelo se puede personalizar ya que se ofrecen más de 400 colores y especificaciones especiales tanto para el interior como el exterior, lo que permite crear unidades únicas al gusto del propietario. Su precio, dependiendo de las opciones elegidas por el propietario, supera ligeramente los trescientos mil euros. En el pasado año Lamborghini vendió 10.687 unidades en todo el mundo, 71 de ellas en España.