Misión: tapar a Messi

Siempre que llega un partido de estas características, es difícil hablar de un favorito, porque son dos equipos con mucho potencial, llegan muy igualados y tienen suficiente calidad individual para resolver un encuentro. Aunque, como se juega en el Santiago Bernabéu y el Madrid llega con la racha de ocho victorias consecutivas, creo que hay un ligero favoritismo para los blancos. Siempre que actúan en casa, tienen que ser favoritos. El partido de la temporada pasada estuvo muy igualado, pero el Real Madrid no supo jugar sus cartas.

Carlo Ancelotti ha construido un bloque muy fuerte que cuenta con la aportación de un futbolista excepcional como Cristiano, que tiene una facilidad goleadora increíble. Al portugués le acompaña un centro del campo con jugadores de clase y una defensa que en los últimos partidos se ha mostrado muy segura y ha aumentado su confianza. Es en el centro del campo donde destaca la calidad del conjunto de Ancelotti, que ha conseguido que, por ejemplo, Isco tenga mayor actitud defensiva. Eso, unido a su extraordinaria calidad, le convierte en fundamental. Sin Bale, el Real Madrid pierde opciones de ataque, pero es un equipo con tanta calidad que lo puede suplir bien. Supongo que será Isco quien juegue, mientras Khedira puede tener sus opciones si el equipo se pone por delante.

El plan es tapar a Messi y para ello es necesario hacer ayudas y coberturas. Arranca desde la derecha y hay que evitar su tiro con la izquierda. Ya lo ha hecho el Madrid otras veces. A su lado no creo que juegue Luis Suárez, por respeto al resto de compañeros. Si el uruguayo juega desde el principio, será mejor para el Madrid: le falta ritmo de competición y su ansiedad por jugar puede ir en su contra.