Sin Perdón

¿Puigdemont y Junqueras se rendirán?

«Ha aparecido la ANC para presionar a ERC y Junts, ya que quiere evitar la investidura de Sánchez»

El sanchismo considera que la elección de la mesa del Congreso y el debate de investidura son un mero trámite para que su líder se mantenga en La Moncloa. El poderoso aparato propagandístico organizado por Barroso el Cubanino y Contreras, que incluye tanto medios de ámbito español como catalán, estigmatizará a los que no mantengan la recta línea de encumbrarle. No se puede permitir que Junts, ERC o el PNV propicien que la ultraderecha y la derecha extrema obstaculicen que el líder del progresismo mundial se mantenga como presidente del Gobierno. Por supuesto, Junts y el PNV son de derechas, pero en este caso se utiliza el palo y la zanahoria. Lo primero es Vox como repelente de cualquier pacto y lo segundo serán las concesiones que luego avalará Cándido Conde-Pumpido como sumo sacerdote jurídico del sanchismo y máximo exégeta de su teología. Es decir, en España es constitucional todo aquello que complazca al líder del PSOE. Eso de la separación de poderes es una chorrada, porque Montesquieu hace mucho tiempo que murió y era, además, un aristócrata y un buen católico.

Los prebostes socialistas saben que el voto favorable de Junqueras, Aragonès y Rovira, los mandamases de ERC, es inamovible. Es la continuidad del Pacto del Tinell. No quieren que gobierne Feijóo. Al PNV lo tienen secuestrado gracias a Vox, aunque Sánchez acabará apoyando a Otegi, si la aritmética lo permite, como lendakari. Lo venderán como el cierre del conflicto en el País Vasco. Mientras tanto, Ortuzar y Urkullu pasarán por caja una factura que pagaremos todos los españoles. El caso de Puigdemont es más complicado, porque se considera el presidente legítimo de Cataluña en el exilio. A pesar de la euforia de los sanchistas y sus aliados de Sumar, ha aparecido la ANC para presionar a ERC y Junts, ya que quiere evitar la investidura de Sánchez. Entre todos crearon ese incontrolable Godzilla independentista que exige que impongan a Sánchez el derecho de autodeterminación a cambio de sus votos. Y Puigdemont sabe que ERC está domesticada y que el objetivo del líder socialista es repetir el tripartito para impedir que Junts recupere la Generalitat.

Francisco Marhuendaes catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE)