El puntazo
Pumpido se cree intocable; no lo es
Conde-Pumpido no es la Carta Magna. Se cree infalible, intocable y por encima de la Ley. Pero no
Cándido Conde-Pumpido es un libro abierto. 7-5. Son los guarismos que calibran sin error el grado de obediencia del Tribunal Constitucional a quien los colocó allí, Pedro Sánchez. El presidente del TC está molesto y se siente ofendido. Ni entiende ni tolera que actores de la vida pública cuestionen su desempeño, incluido el recurso de los tribunales a la Justicia europea que ha intentado reventar sin éxito. Se expuso ayer en un acto público. Le «preocupa muchísimo» que se esté cuestionando la legitimidad del TC desde la política y el Tribunal Supremo, lamentando que se amenace a sus magistrados incluso por la «vía penal», al tiempo que advirtió de que atacar a la corte de garantías es atacar a la Constitución. Tranquilizó a Sánchez: la amnistía estará lista «antes del verano». 7-5. Conde-Pumpido no es la Carta Magna. Se cree infalible, intocable y por encima de la Ley. Pero no.