Historias del mundo

Salir de lo imposible

«Tres pilotos lituanos se han propuesto cruzar Europa sin motor»

Quieren ser los primeros en sobrevolar Europa sin motor. Estos tres pilotos de planeadores lituanos, Algirdas Šimoliunas, de 37 años, Sakalas Uždavinys, de 61, e Ignas Bitinaitis, de 26, se han propuesto cruzar el viejo continente este verano. Se conocen desde 2013, cuando coincidieron en el Aeroclub de Panevežys y ya han logrado varios hitos como sus vuelos a vela sobre los Estados bálticos (en 2016) y hasta el Mar Negro, Ucrania (en 2018). Esta vez, los tres aventureros partirán desde el aeródromo de Paluknys, cerca de Vilna, y recorrerán unos 4.000 km hasta la costa portuguesa en diez días.

A Sakalas le apetece mucho volar por España y Francia debido «a las fuertes condiciones, grandes altitudes y altas velocidades». Algirdas me cuenta que, además de nuestro país, le encanta Alemania, pues sus ciudades son «como un cuento de hadas».

Que este sea uno de los veranos con más vuelos comerciales no tiene ningún impacto a la hora de planear su hazaña. «Volamos en un espacio completamente diferente al de un Boeing. Y si llegamos a colisionar, el planeador tiene prioridad sobre el Boeing», explica Algirdas. En cuanto a las altas temperaturas del estío, «eso es tanto bueno como malo» a la hora de volar. «Lo malo es que también hace calor por la noche y no hay mucha diferencia de temperaturas a lo largo de la jornada».

De momento, no coinciden en qué será lo primero que hagan cuando logren su objetivo: Portugal. «Iremos a nadar. Pero en realidad, el cerebro lucha por comprender que estaremos allí», reconoce Algirdas. A lo que Ignas contesta: «Dar un paseo por la ciudad» mientras que Sakalas aún no lo ha pensado. «Nosotros los pilotos tenemos que pensar en el presente. Lo primero que haré es entender qué estamos haciendo aquí».

Es un auténtico gusto cruzarse con unos pilotos tan apasionados que no dudan en contar qué es lo mejor de este desafío. «Todo es cambiante. No te cansas de volar porque vuelas a través de nuevos países, nuevos lugares. La naturaleza europea es muy hermosa y me encanta volar sobre las colinas». Para Ignas, «experimentar diferentes tipos de clima y ver cómo cambia». Mientras que Sakalas, va más allá: «Salir de lo imposible».