El trípode
Sanchismo: el «gran bulo»
Ante una situación de estas características donde la verdad es inexistente para el sanchismo y todos sus corifeos, es imposible creer nada de lo que afirman
Escribíamos ayer respecto al «caos» –ya histórico– vivido este lunes 28 de abril en España, ocasionado porque al apagón de electricidad que lo ocasionó hay que añadirle el «apagón informativo» del Gobierno, que lo amplificó exponencialmente durante interminables horas. Por ello reproducíamos en transcripción literal, anteriores afirmaciones al respecto de Pedro Sánchez en el Senado y de Beatriz Corredor, la presidenta de Red Eléctrica (destacada socialista y ex ministra con Zapatero), –entrevistada en Antena3 por Susanna Griso en su programa Espejo Público–, donde se mostró rotunda en descartar cualquier posibilidad de que en España pudiera producirse un apagón como el sucedido este lunes. Y por si no fueran suficientes esas rotundas declaraciones respecto a un eventual suceso como el producido, y que ambos descartaban, también incluimos otra pieza similar grabada en video por el «jefe de economía de la cadena SER» con gráficos incluidos para demostrar que técnicamente era imposible un apagón de esas características en España. Y que lo zanjaba diciendo que afirmar lo contrario era un «gran bulo» y que quienes lo propagaban «deberían explicar a qué intereses sirven». En absoluta coherencia con todo ello, ayer la (todavía) presidenta de Red Eléctrica, se fue precisamente a la SER, a proclamar exactamente todo lo contrario a lo que ella misma había afirmado anteriormente en el referido programa de televisión. Ante una situación de estas características donde la verdad es inexistente para el sanchismo y todos sus corifeos, es imposible creer nada de lo que afirman, lo que da pie a que surjan todo tipo de especulaciones respecto a la causa de lo sucedido y la auténtica motivación de la misma. Ahora, el Gobierno exige información a Red Eléctrica y a las compañías privadas de luz, y ha abierto una comisión de investigación para averiguar la causa del caos. Es obvio que nadie con un mínimo de lucidez puede confiar en que de estos personajes pueda proceder nada aproximado a la verdad de lo sucedido. El «gran bulo» lo encarnan ellos y es un ejemplo paradigmático de en qué manos se encuentra España. Repetimos: con personajes así, que encarnan en ellos mismos «el gran bulo», es imposible una convivencia digna, basada en el respeto mutuo en el seno de una sociedad plural en sus opiniones y creencias. Consecuencia inevitable de ese indigno proceder de quienes ostentan la autoridad pública oficial es una degradación ética y moral del cuerpo social, que alimenta las mentes de quienes todavía apoyan ese proceder con su voto. Los constituyentes sin duda no creyeron que podría hacerse con el gobierno tal personaje con auténtica vocación de autócrata y dispuesto a todo para mantenerse en el poder.