El trípode del domingo
La Virgen del Carmen
El 16 de Julio de 1251 se apareció al superior general de los carmelitas San Simón Stock, entregándole el Escapulario con la promesa de que quienes lo lleven con devoción salvarán su alma de la condenación eterna
Francia no podrá celebrar hoy 14 de julio su Fiesta Nacional en Berlín disputando la victoria en la final de la Eurocopa de fútbol, lo que sí hará España tras eliminarla. Nuestra «Armada» futbolística al mando de Luis de la Fuente, –hasta ahora invencible–, tiene ante sí la oportunidad de vencer a Inglaterra y desquitar nuevamente la anterior derrota. Unidos al seleccionador, encomendamos –junto al «Cachorro»– la suerte de la «Armada» a su Patrona Nuestra Señora del Monte Carmelo, la Virgen del Carmen, que pasado mañana celebra su fiesta litúrgica con la solemnidad que merece tan señalada advocación mariana. Su Historia se remonta a nueve siglos antes de Cristo, y está muy vinculada al «profeta del fuego» Elías, eremita en Monte Carmelo y a Enoc, ambos con una misión muy especial para los últimos tiempos. Ella es la mujer del Libro del Apocalipsis que combatirá al diablo y al que aplastará la cabeza: es la Santísima Madre del Carmelo a la que veneran sus hijas e hijos carmelitas por el mundo entero.
Precisamente el 16 de Julio de 1251 se apareció al superior general de los carmelitas San Simón Stock, entregándole el Escapulario con la promesa de que quienes lo lleven con devoción salvarán su alma de la condenación eterna. Más tarde, el siglo XVI marcará un punto de inflexión en la Historia carmelitana con una descalza española y universal, Teresa de Jesús, instrumento Providencial para la reforma teresiana de la Orden de la Virgen. Comenzará esa misión el 26 de agosto de 1562 saliendo del Monasterio de la Encarnación para comenzar sus fundaciones con el Carmelo de San José también en Ávila. El Papa Pablo VI la proclamará como la primera mujer Doctora de la Iglesia junto a santa Catalina de Siena, el 27 de septiembre de 1970, –a los cien años exactos de la caída de Roma y la pérdida definitiva de los Estados Pontificios– estando la Iglesia sumida en la «crisis postconciliar». El Carmelo es indisociable de la obra de santa Teresa de Jesús junto a san Juan de la Cruz, que hoy goza de una constelación de estrellas de santidad fieles seguidoras de su Santa Madre. Santa Teresa del Niño Jesús y la Santa Faz (santa Teresita) será la siguiente mujer designada Doctora, y lo hará san Juan Pablo II en el centenario de su fallecimiento en 1997. Grandes Santas como Maravillas de Jesús, Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein, mártir en Auschwitz), Teresa de Jesús de los Andes (cuya fiesta fue ayer), etc., etc.
Muchas felicidades también a los hombres de la mar por su excelsa Patrona, la Virgen del Carmen.
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