Santoral

¿Qué santo se celebra hoy, 24 de junio? Esto es lo que debes saber del santoral de la Iglesia Católica

Hoy se conmemora a San Juan Bautista y a San Agilberto y compañeros

Nacimiento de san Juan Bautista
Nacimiento de san Juan BautistaMuseo Nacional Del PradoMuseo Nacional Del Prado

En el corazón de la tradición católica, el santoral ocupa un lugar especial como un compendio de las vidas y virtudes de los santos, hombres y mujeres que, a lo largo de la historia, han destacado por su fe, entrega y compromiso con Dios.

¿Qué es el Santoral?

El santoral es un calendario litúrgico que asigna a cada día del año la conmemoración de uno o más santos. Esta tradición se remonta a los primeros siglos del cristianismo, cuando las comunidades cristianas comenzaron a honrar la memoria de sus mártires y otros personajes ejemplares.

¿Cómo se elige a los santos que figuran en el Santoral?

La inclusión de un santo en el santoral es un proceso riguroso que requiere la aprobación de la Iglesia Católica. Para ser considerado santo, un individuo debe cumplir con ciertos criterios, como haber llevado una vida virtuosa, haber realizado milagros o haber sufrido martirio por su fe.

Estos son los santos que se conmemoran hoy lunes 24 de junio

  • San Juan Bautista (Natividad)
  • San Agilberto y compañeros
  • San Agoardo mártir
  • San Farnacio mártir
  • San Goardo de Nantes
  • San Rumoldo de Malinas
  • San Simplicio de Autun
  • San Teodgaro de Vestervig
  • San Teodulfo de Lobbes
  • Beata María de Guadalupe García Zavala

San Juan Bautista: el precursor que anunció la llegada del Mesías

La Carta : Natividad de san Juan Bautista
La Carta : Natividad de san Juan Bautistadiocesisciudadreal.esdiocesisciudadreal.es

En el calendario cristiano, la fecha del 24 de junio tiene un significado especial: se celebra la Natividad de San Juan Bautista, el profeta que anunció la venida del Mesías y preparó el camino para su llegada.

Un nacimiento marcado por el milagro

Juan Bautista nació en el seno de una familia sacerdotal judía, siendo hijo de Zacarías, un sacerdote, e Isabel, prima de la Virgen María. Su nacimiento estuvo rodeado de milagros, ya que Zacarías, siendo ya anciano, dudó de la promesa del ángel Gabriel de que tendría un hijo, por lo que fue silenciado hasta el día del nacimiento de Juan.

Un profeta desde el vientre materno

Según la tradición cristiana, Juan Bautista ya fue santificado en el vientre de su madre cuando Isabel se encontró con la Virgen María embarazada de Jesús. Este encuentro marcó la relación especial que existiría entre ambos primos desde el momento de su nacimiento.

Una vida consagrada a la predicación

En su vida adulta, Juan Bautista se convirtió en un profeta austero que predicaba en el desierto de Judea. Su mensaje era claro y contundente: instaba al arrepentimiento de los pecados y anunciaba la inminente llegada del Mesías, el salvador del pueblo judío.

El bautismo de Jesús

Uno de los momentos más importantes en la vida de San Juan Bautista fue el bautismo de Jesús en el río Jordán. Al bautizar a su primo, Juan reconoció la divinidad de Jesús y lo proclamó como "el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo" (Juan 1:29).

Un legado de fe y valentía

Fue encarcelado por Herodes Antipas por criticar su conducta inmoral. A pesar de las amenazas y presiones, Juan no se retractó de sus palabras y murió decapitado alrededor del año 30 d.C.

Un santo venerado en todo el mundo

San Juan Bautista es considerado uno de los santos más importantes del cristianismo. Su figura representa la fe, la valentía y la preparación del camino para la llegada del Mesías. Es venerado en todo el mundo y su fiesta se celebra el 24 de junio, seis meses antes del nacimiento de Jesús.

Un mensaje para la actualidad

La vida de San Juan Bautista nos invita a reflexionar sobre la importancia de la preparación del corazón para recibir a Cristo. Su mensaje de arrepentimiento y conversión sigue siendo relevante en la actualidad, ya que nos recuerda la necesidad de cambiar nuestras vidas para seguir el camino de Dios.

San Agilberto y compañeros: Mártires de la fe en tiempos de despaganización

San Agilberto y compañeros
San Agilberto y compañerosHAGIOPEDIAHAGIOPEDIA

En la historia del cristianismo primitivo, la figura de San Agilberto y sus compañeros brilla con luz propia como un ejemplo de fe inquebrantable y fidelidad a Dios en tiempos de persecución. Estos mártires, cuya fecha de conmemoración es el 24 de junio, ofrendaron sus vidas en defensa de su fe durante el proceso de despaganización de la región de Galia (actual Francia) en los siglos V o VI.

Un contexto histórico de cambio

Durante los siglos V y VI, la región de Galia, bajo el dominio romano, experimentó un proceso gradual de despaganización y conversión al cristianismo. Sin embargo, este proceso no estuvo exento de resistencias y conflictos, especialmente en las zonas rurales donde las antiguas creencias paganas aún tenían un fuerte arraigo entre la población.

Agilberto y sus compañeros: Defensores de la fe cristiana

En este contexto de transición religiosa, San Agilberto y sus compañeros se erigieron como defensores de la fe cristiana en la región de Créteil, cerca de París. Su labor evangelizadora y su compromiso con la nueva fe los convirtieron en figuras prominentes en la comunidad cristiana local.

Un martirio por la fe

Las actividades de Agilberto y sus compañeros no pasaron desapercibidas para las autoridades romanas, quienes aún mantenían cierta tolerancia hacia las antiguas creencias paganas. En un momento de particular tensión entre la fe cristiana y las tradiciones paganas, Agilberto y sus compañeros fueron arrestados y acusados de diversos delitos, entre ellos la profanación de templos paganos.

Enfrentamiento y muerte

A pesar de las presiones y amenazas, Agilberto y sus compañeros se negaron a renunciar a su fe cristiana. Su firmeza y convicción los llevaron a un enfrentamiento directo con las autoridades, culminando en su martirio. Según la tradición, fueron ejecutados en un lugar llamado "Vicus Cristolium" (actual Créteil) a finales del siglo V o principios del VI.

Un legado de fe y valentía

San Agilberto y sus compañeros se convirtieron en símbolos de la fe cristiana en la región de Galia. Su martirio sirvió como inspiración para otros cristianos que enfrentaban persecución por sus creencias. Su legado nos recuerda la importancia de la fe, la valentía y la fidelidad a Dios, incluso en tiempos difíciles.

Veneración y culto

Las reliquias de San Agilberto y sus compañeros fueron conservadas y veneradas por la comunidad cristiana local a lo largo de los siglos. Su culto se extendió por la región y su historia fue narrada en diversas actas de los mártires. En la actualidad, son considerados santos por la Iglesia Católica y su memoria se celebra el 24 de junio.