¿Qué santo se celebra hoy, 28 de junio? Esto es lo que debes saber del santoral de la Iglesia Católica

Hoy, viernes 28 de junio, el santoral de la Iglesia Católica conmemora a varios beatos y santos que han formado parte de la historia del cristianismo. Además de ser una forma de honrar a los santos y beatificados, también sirve como una guía para los católicos, que pueden encontrar inspiración en las vidas y obras de estos santos.

¿Qué santos se celebran hoy viernes 28 de junio?

• San León II

• San Argimiro de Córdoba

• Santa Lucía Filippini

• San Teodoro de Novgorod

San Ireneo

Vida y Pontificado

San Ireneo, nacido alrededor del año 130 d.C. en Asia Menor (actual Turquía), fue un destacado obispo y teólogo de la Iglesia primitiva. Se formó bajo la tutela de San Policarpo, discípulo del apóstol Juan, lo que le otorgó una conexión directa con los primeros tiempos del cristianismo. Enviado como misionero a Lyon, Francia, eventualmente se convirtió en obispo de la ciudad. Durante su pontificado, San Ireneo enfrentó las crecientes herejías gnósticas que amenazaban la unidad y la doctrina de la Iglesia. Su obra más famosa, "Adversus Haereses" (Contra las Herejías), refutó sistemáticamente estas enseñanzas, defendiendo la fe cristiana ortodoxa y destacando la sucesión apostólica y la autoridad de las Escrituras como fundamentos esenciales.

Exilio y Muerte

Aunque no se sabe con certeza los detalles, San Ireneo enfrentó momentos de persecución y posiblemente fue exiliado de Lyon durante las persecuciones hacia los cristianos. Murió mártir alrededor del año 202 d.C., pero los registros históricos sobre las circunstancias exactas de su muerte son limitados. A pesar de su martirio, la memoria de San Ireneo perduró como un testimonio de su firmeza en la fe y su dedicación a la defensa de la ortodoxia cristiana.

Canonización y Legado

San Ireneo fue reconocido como santo por la Iglesia Católica y otras denominaciones cristianas. Su festividad se celebra el 28 de junio, conmemorando su vida, obra y legado teológico. Además de su contribución invaluable en la lucha contra las herejías gnósticas, el legado de San Ireneo incluye su enfoque pastoral en la promoción de la unidad de la Iglesia y la paz entre los cristianos. Es venerado como uno de los Padres de la Iglesia y un ejemplo de fidelidad a la tradición apostólica en los primeros siglos del cristianismo.