El «golpe» de España al cáncer colorrectal metastásico: somos clave en la lucha contra este letal tumor

La investigación médica en España acaba de alcanzar un nuevo hito con la presentación de los resultados de la cohorte española del ensayo clínico internacional FRESCO-2, en el Congreso de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), que se celebra del 15 al 18 de octubre. Este estudio de fase 3 evalúa la eficacia y seguridad del fármaco fruquintinib en pacientes adultos con cáncer colorrectal metastásico (CCRm) refractario, que ya han agotado las terapias estándar disponibles.

Fruquintinib es la primera terapia dirigida aprobada en la Unión Euorpea, en más de una década, indicada para el tratamiento del cáncer colorrectal metastásico. Con más de 180 pacientes reclutados en 16 centros de España, nuestro país ha desempeñado un papel clave en esta investigación de impacto global. Los resultados respaldan la aprobación de fruquintinib el pasado junio (comercializado como FRUZAQLA en Europa) por parte de la Comisión Europea, lo que representa un avance en el tratamiento de un tipo de cáncer que, hasta ahora, contaba con opciones terapéuticas limitadas y con eficacia moderada en etapas avanzadas.

El cáncer colorrectal metastásico (CCRm) es uno de los más comunes y letales en Europa y el mundo. Según datos del Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer, es el segundo cáncer más frecuente en Europa y fue responsable de aproximadamente 245.000 muertes en 2020. Para los pacientes que no responden a los tratamientos iniciales, las alternativas hasta ahora han sido escasas y a menudo de baja efectividad.

El estudio FRESCO-2 publicado en la prestigiosa revista médica The Lancet en 2023 se llevó a cabo en múltiples centros internacionales, pero los espacios de España jugaron un rol fundamental. No en vano, uno de cada cuatro pacientes fue reclutado en alguno de los 16 centros abiertos en España, siendo por ello el país que más pacientes ha aportado al estudio.

El objetivo del trabajo fue evaluar la eficacia de fruquintinib combinado con el mejor tratamiento de soporte (BSC) frente a un grupo de control que solo recibió BSC. Este medicamento es un inhibidor oral selectivo de VEGFR -1, -2 y -3. Cabe destacar que los inhibidores de VEGFR desempeñan un papel fundamental en el bloqueo de la angiogénesis tumoral.

Esto significa que privan al tumor de nutrientes y oxígeno, lo cual ralentiza su crecimiento. Los resultados demostraron que fruquintinib logró una mejora significativa tanto en la supervivencia global (SG) como en la supervivencia libre de progresión (SLP) en comparación con el placebo, marcando un claro avance en el tratamiento de pacientes con CCRm.

La contribución de España al ensayo sobre cáncer colorrectal

El papel de España en el estudio ha sido fundamental. Los 180 pacientes incluidos en la cohorte española representan un notable compromiso con la ciencia y la innovación médica. Esto subraya el interés de España en liderar el desarrollo de nuevas terapias oncológicas y contribuir a un avance significativo en la calidad de vida de los pacientes con CCRm.

Para la doctora Rocío García Carbonero, coordinadora de la unidad de tumores digestivos y neuroendocrinos en el Hospital Universitario 12 de Octubre, los resultados de este estudio ofrecen «una esperanza para aquellos pacientes que, habiendo agotado otras opciones, se enfrentaban a un pronóstico difícil». Destaca que «cada nueva línea de tratamiento suma y contribuye a cronificar la enfermedad, lo cual es de gran relevancia para los pacientes con cáncer colorrectal avanzado».

El ensayo arrojó resultados consistentes. El estudio FRESCO-2 alcanzó todos sus objetivos primarios y secundarios clave, lo cual refuerza los hallazgos previos del ensayo global y proporciona mayor robustez a los datos presentados. En términos de seguridad, el perfil de fruquintinib resultó ser manejable, con una tasa de discontinuación del tratamiento debido a reacciones adversas del 20% en el grupo tratado, frente al 21% en el grupo placebo. Las reacciones adversas más comunes incluyeron fatiga y presión arterial elevada, efectos que se consideran gestionables con un control médico adecuado.

Un futuro prometedor para el tratamiento del cáncer en España

La aprobación de fruquintinib en la Unión Europea supone un avance histórico, ya que es la primera terapia dirigida para el CCRm aprobada en más de una década. Este hito llega en un momento crítico para la oncología en Europa, donde se buscan con urgencia nuevas terapias que puedan mejorar la calidad y esperanza de vida de los pacientes. La innovación detrás de fruquintinib también abre la puerta a futuras combinaciones con otros tratamientos, lo cual podría ampliar aún más su aplicabilidad en otros tipos de cánceres avanzados.

Fernando Valpuesta, Director de la Unidad de Oncología en Takeda España, subrayó el compromiso de la empresa en «ofrecer a los pacientes una opción de tratamiento novedosa y eficaz, con un perfil de seguridad manejable». Destacó, además, el valor de la colaboración entre el sector farmacéutico y los centros de investigación en España, que han trabajado juntos para lograr un avance que ahora beneficia a los pacientes de toda Europa.

Contribuir a un ensayo clínico de esta envergadura no solo mejora la calidad de la atención médica en el país, sino que también posiciona a España como un líder en investigación clínica y oncológica a nivel mundial. Los centros de salud e investigación en España están cada vez más alineados con las principales iniciativas científicas, lo cual abre puertas a más estudios y recursos destinados a la salud.

En conclusión, los resultados del ensayo FRESCO-2 y la aprobación de fruquintinib en la UE son un hito en la investigación oncológica que podría cambiar el futuro del tratamiento para miles de personas con cáncer colorrectal metastásico. Con esta nueva terapia, España reafirma su liderazgo en investigación clínica y su compromiso de mejorar la vida de los pacientes oncológicos, ofreciendo una esperanza renovada y demostrando que, con el esfuerzo conjunto de centros médicos y científicos, es posible encontrar soluciones para los desafíos más difíciles en la lucha contra el cáncer.