¿En qué punto se encuentra el VIH en la actualidad?

En la actualidad, aproximadamente alrededor de 150.000 personas viven con VIH en España, estimándose una media de diez contagios diarios. La edad media es de 36 años y el 84% de los diagnosticados son hombres. No obstante, con la llegada de la PrEP (profilaxis preexposición) como elemento clave en la estrategia de prevención del VIH, sumado a otras medidas básicas como el uso del preservativo, se está consiguiendo reducir el número de contagios. En relación con el tratamiento, los actuales antirretrovirales resultan más cómodos, disponiendo desde la toma de un comprimido diario a tratamientos inyectables de acción prolongada que se administran cada dos meses.

1. ¿Cuál es la diferencia entre VIH y sida?

El VIH son las siglas del virus de inmunodeficiencia humana, el patógeno que causa el sida. Una vez contraída la infección, existe una lucha entre el sistema inmune, que intenta combatir la infección, y el virus que ataca a los linfocitos CD4. Sin el tratamiento adecuado, el virus va destruyendo las células hasta acabar con el sistema inmune, ante lo cual pueden aparecen diferentes enfermedades adicionales hasta aparecer el síndrome de la inmunodeficiencia adquirida, o sida. Ahora bien, en la actualidad con el tratamiento oportuno, una persona con VIH puede evitar el avance de la enfermedad y, por tanto, nunca llegar al estadio sida.

2. ¿Cuál es la supervivencia de los pacientes con VIH?

Hoy en día, con el tratamiento antirretroviral adecuado, y sin un diagnóstico de sida previo, se puede tener una esperanza de vida que se aproxime a la de la población general. El objetivo 95-95-95 de ONUsida es que el 95% de las personas con VIH estén diagnosticadas; que el 95% de ellas esté en tratamiento, y que el 95% de estas cuente con carga viral indetectable y, por tanto, intransmisible.

3. ¿Cuáles son los síntomas o señales de alarma?

La infección por VIH tiene diversas fases. La inicial, también conocida como de infección aguda, suele aparecer de dos a diez semanas tras la infección, cuando aparecen síntomas como fiebre, aumento del tamaño de los ganglios, dolor de cabeza y erupción cutánea, entre otros. Posteriormente en la fase intermedia, el VIH sigue replicándose mientras las «defensas» (linfocitos CD4) son destruidas, pudiendo apreciarse un aumento de los ganglios linfáticos. De esta fase se avanza a la infección crónica, que sin tratamiento antirretroviral, evolucionaría a sida entre los 10 y 12 años desde que se adquirió el virus. Ya en la fase avanzada, o sida, el sistema inmunitario está completamente mermado y es cuando aparecen otras infecciones oportunistas e incluso tumores.

4. ¿Sigue existiendo estigma en torno al VIH?

Lamentablemente, continúa habiendo discriminación relacionada con la infección. De hecho, el estigma y la discriminación en relación con el VIH son dos problemas generalizados para combatir la epidemia, pues limitan el acceso a los servicios de prevención, las pruebas y el tratamiento de aquellos que se encuentran en situaciones de mayor riesgo. En un estudio publicado recientemente por Cesida, se concluye que todavía hay un 49% de personas que se sentirían incómodas si un compañero del colegio de su hijo tuviese VIH; el 10% de los encuestados no tendría contacto con nadie con VIH; o que el 26% se sentiría incómodo trabajando con alguien con VIH.

5. ¿Cómo se puede educar para prevenir este estigma?

España ha solicitado su adhesión a la Alianza Mundial para eliminar todas las formas de estigma y discriminación relacionadas con el VIH de ONUsida. Insistir en que la educación y la concienciación sobre la enfermedad es la base para reducir el estigma. Se trata de eliminar falsas creencias, mitos y actitudes negativas, discriminatorias y excluyentes tanto en la población general como en las personas afectadas, debiendo abordarse desde ámbitos educativo, sanitario, doméstico e incluso laboral, promoviendo una mayor protección de los derechos personales de las personas con VIH y tender a su normalización en todos los ámbitos. Todos podemos contribuir a reducir la discriminación que sufren, pues con tratamiento antirretroviral y carga viral indetectable es igual a intransmisible.