Las siete aficiones más extrañas del ser humano

Las aficiones son parte fundamental de la vida. Deporte o colecciones son dos de los más comunes entre la población aunque existen miles de estos muy distintos que se adaptan a cada persona. En los últimos años, además, han aparecido todo tipo de hobbies que se han popularizado por las redes sociales causando auténtico furor en muchas personas.

Los aficionados al manga y al anime celebran cada 15 de diciembre se celebra el Día Mundial del Otaku. Esta celebración que, aunque no es oficial, está muy extendida en redes sociales rinde homenaje a los apasionados a la cultura japonesa.

Gracias a la fecha y repercusión en redes la celebración se está universalizando cada vez más convirtiéndosela en un fenómeno de masas. El término Otaku se emplea para nombrar a una persona con aficiones relacionadas con el manga aunque también se emplea para describir a una persona a la que le gusta el cosplay.

Este sinónimo de disfrazarse suele hacer referencia a alguien a quien le gusta caracterizarse de personajes realcionados con el mundo de los videojuegos o personajes de manga o anime. Aun así este término también cuenta con una definición que no suele ser muy bien recibida por los fans.

Ser un Otaku tiene un significado peyorativo y se emplea popularmente en Japón para nombrar a una persona con aficiones obsesivas. Lo que hoy en día se suele denominar como “friki” se utiliza en el país asiático para referirse a estos aficionados. Este término proviene de la definición moderna de la palabra, que popularizó Akio Nakamori en la revista Manga Burikko en el año 1973.

Llegados a este punto y debido a la gran variedad de aficiones existentes hemos recogido aquellas que resultan más curiosas y extrañas. Aunque algunas no sean populares si existen pequeños reductos que las llevan a acabo y que no todo el mundo es capaz de entender.

Las aficiones más extrañas del mundo

• Hacerse el muerto: aunque morir pueda ser uno de los mayores temores para muchos hay quien realiza el simulacro de esto para divertirse. Uno de los casos más famosos es el de Chuck Lamb, también conocido como el hombre cadáver. Padre de seis hijos y casado siempre ha querido ser actor por lo que publica fotos como su hubiera muerto que acumulan más de 30 millones de visitas.
• Aparecer de fondo en televisión: cuando se realiza una conexión en directo hay quien decide boicotear y molestar. Esto que en ocasiones puede resultar muy molesto para los trabajadores es una afición que algunos realizan cuando ven una grabación e, incluso, llegan a buscar donde se encuentran las cámaras.
• Regalar dinero a desconocidos: a partir de varias campañas por redes sociales existe quien decide regalar dinero a gente que no conoce. Aunque seguramente lo realice quien le sobre este ha llegado a convertirse en un hábito compartido.
• Tejer pechos de lana: crear cosas a partir de este elemento se ha puesto de moda en los últimos años. La lana se encuentra a la orden del día, también para Audrey Horncastle. Esta anciana crea pechos de lana para donarlos a hospitales y que los puedan probar en diferentes ensayos.
• Tocar guitarras de aire: esta afición cuenta hasta con su propio concurso internacional. Desde hace años se ha extendido este hobbie que ha traspasado las guitarras y ha llegado a otros instrumentos como la batería.
• Cantar junto a los peces: existen verdaderos aficionados a tocar instrumentos y cantar bajo el agua para tocar rodeados de peces. Incluso, existe un festival en Florida de música bajo el mar donde se toca con trajes de buceo.
• Bogsnorkelling: aunque haya a quien le pueda parecer repugnante esta palabra tan complicada describe bucear en un pantano. Bajo aguas cenagosas, verdes o marrones se trata de buscar criaturas entre agua y vegetación descompuesta.