¿Por qué no hay que guardar las patatas con las cebollas?

Cocinar es uno de los hábitos más habituales para el ser humano. Desde hace siglos realizamos distintas recetas a través del ensayo error. Así, cada día de alguna forma la mayoría de las personas en las sociedades actuales elabora algún plato para alimentarse.

Pese a que en los últimos años la comida preparada ha ganado terreno cocinar en la mayoría de hogares muchos todavía se resisten. Debido a los cambios sociológicos de los últimos años los platos preparados han entrado en los hogares. Pese a ello, existen corrientes que tratan de atraer a la gente de nuevo a las cocinas.

Estos cambios, además, han provocado que muchos renieguen de cocinar. No obstante, han aparecido distintas corrientes que buscan aprender con talleres u otras opciones. Gracias a ello, además, se busca no perder la gran tradición culinaria existente en algunos rincones del mundo como es el caso de España.

Nuestro país cuenta, así, con una de las cocinas más reputadas del mundo. Además, la gran tradición culinaria española ha provocado que muchos de los cocineros de mayor renombre en la actualidad sean españoles gracias a una mezcla de tradición e innovación.

Incluso, algunos platos o alimentos españoles son envidiados en todo el mundo provocando que exista el turismo gastronómico. Sin llegar a ese extremo, además, para muchos visitantes extranjeros degustar platos típicos de España resulta toda una delicia durante su estancia en el país.

Esta historia se debe en parte a alimentos utilizados durante décadas. La patata o la cebolla son dos grandes ejemplos. Incluso, gracias a su gran durabilidad solemos guardarlas en el mismo lugar, algo que es un gran error.

No se deben guardar juntas

Así las cosas, estos dos alimentos presentes en cientos de platos como la tortilla -pese el gran debate- pueden ser enemigos entre sí al guardarse. El problema reside en un gas emitido por ambos llamado etileno. Así, esta hormona producida de forma natural en los procesos de maduración de verduras, frutas y flores puede dañar los alimentos.

Este gas una vez acumulado en el ambiente causa la maduración acelerada. Además, los expertos señalan que pierden calidad mientras se pudren de forma acelerada. La expulsión de etileno, así, se considera la forma de respirar de estos alimentos pese a que causa efectos en otros cercanos.

Así las cosas, debemos evitar a toda costa guardar estos dos alimentos uno al lado del otro. El etileno, además, ayuda a alcanzar el punto idóneo pese a que desgasta el resto de frutas o verduras cercanas como en el caso de las patatas y cebollas.

La patata, además, es uno de los que más etileno desprende por lo que deteriora la cebolla de forma abrupta. Por ello, pese a guardarlas en muchas ocasiones juntas por su parecido en durabilidad debemos separarlas en espacios distintos.