Ciencia
Adiós a los radiadores este invierno la alternativa barata que los va sustituir
Este material podría cambiar para siempre la forma en que calentamos nuestros hogares
Imagina que el calor de tu casa no viene de un radiador, ni de un panel en la pared, sino de la propia pared. Que con una simple capa de pintura bastara para transformar una habitación fría en un espacio confortable, sin tuberías, calderas ni obras. Puede sonar a ciencia ficción pero la realidad es que podría estar a punto de convertirse en una realidad cotidiana.
Un grupo de investigadores italianos asegura haber encontrado la fórmula. Un tipo de pintura capaz de calentar una habitación con solo conectarla a la corriente eléctrica. Detrás de esta idea se encuentra el Instituto Italiano de Tecnología (IIT).
Cómo funciona
La clave está en el efecto Joule, el principio físico que permite a un material conductor generar calor cuando es atravesado por una corriente eléctrica. En este caso, el grafeno, una lámina de carbono muy fina que forma una red conductora invisible sobre la superficie pintada. Con solo conectar dos electrodos de cobre, la pared o el techo recubiertos con esta pintura comienzan a emitir radiación infrarroja, calentando objetos y personas del entorno de manera uniforme.
Su funcionamiento recuerda al de los paneles de calefacción por infrarrojos de onda larga, que no calientan el aire, sino los cuerpos que hay en la estancia, proporcionando una sensación de confort inmediato. Se trata de una tecnología que ha ganado adeptos en los últimos que BeDimensional, una empresa derivada de la IIT, quiere llevar al siguiente nivel: si aplicar un panel ya era sencillo, pintar una pared lo es aún más.
Menos consumo y sin mantenimiento
Según pruebas realizadas por BuildTech, otra empresa derivada del IIT, esta pintura podría reducir el consumo eléctrico hasta un 40% respecto a los calefactores convencionales, con una eficiencia energética comparable a la de las bombas de calor. Por ahora, las cifras son promesas, pero si se confirmaran, estaríamos ante un avance que podría cambiar la forma en que entendemos la calefacción en el hogar.
Aún así los expertos recuerdan que todo sistema basado en resistencia eléctrica tiene limitaciones frente a las bombas de calor, más eficientes por principio físico. Y que, al no calentar el aire, el efecto desaparece en cuanto se apaga la corriente.
una alternativa para ciertos espacios
Pese a sus límites, las aplicaciones potenciales son muchas, desde espacios donde no se quieren hacer reformas hasta zonas de uso puntual, como baños o en alguna habitación. En esos contextos, convertir paredes y techos en una fuente de calor invisible podría ser una alternativa práctica, económica y sorprendentemente elegante.
Si las promesas de BeDimensional se cumplen, quizá en unos años pintar una casa no sea solo una cuestión estética, sino también de temperatura