Agencia Espacial Europea

La corteza de Venus mide hasta 100 kilómetros en las zonas más altas

La corteza de Venus tiene un espesor de entre 20 y 25 kilómetros, aunque que en las tierras altas, como mesetas y grandes macizos volcánicos, aumenta hasta los 100 kilómetros. Así lo indica un estudio en el que han participado científicos de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Publicado en la revista 'Ícarus', el trabajo utiliza datos tomados por la sonda 'Magallanes', que orbitó en torno al planeta entre 1990

y 1994, gracias a los cuales se ha podido averiguar cómo la litosfera de Venus varía por regiones. Venus y la Tierra tienen muchos rasgos en común: un tamaño similar, una densidad y composición equivalentes y distancias al Sol comparables. Sin embargo, la tectónica y la evolución dinámica de ambos cuerpos son muy diferentes, ya que la litosfera de Venus es estable y no muestra evidencia detectónica de placas en la actualidad. Según los autores, esto sugiere que la mayor parte de la corteza venusiana se formó en condiciones diferentes a las que había cuando se desarrollaron gran parte de las tierras altas.

HISTORIA TÉRMICA

El modelo diseñado por los científicos refleja variaciones de espesor elástico (un indicador de la resistencia de la litosfera a largo plazo), lo que podría indicar que estas variaciones de espesor están relacionadas con la historia de enfriamiento de la litosfera de Venus. Las mesetas presentan menor espesor elástico, con una corteza de mayor grosor debajo de ellas, mientras que las llanuras volcánicas muestran valores de espesor elástico altos, “quizá indicativos de una litosfera más fría que cuando se formaron las tierras altas”. Los grandes macizos volcánicos, con diámetros de entre 1.000 y 2.500 kilómetros y numerosos edificios volcánicos relacionados con procesos geodinámicos profundos, muestran un comportamiento mecánico muy complejo. Según observaciones realizadas por la misión 'Venus Express' de la Agencia Espacial Europea, hay evidencias de vulcanismo reciente o incluso actual en la superficie del planeta. A pesar de estos nuevos datos, los científicos recuerdan que seguimos conociendo muy poco sobre este planeta rocoso. “La historia térmica de Venus continúa siendo un enigma y hay muchas preguntas planteadas sobre la estructura y evolución de su litosfera, cuyas respuestas nos ayudarían a comprender Venus en el marco de los planetas terrestres”, indicó Alberto Jiménez-Díaz, investigador del departamento de Geodinámica de la Universidad Complutense de Madrid.