Ciencias humanas

Óvulos creados en el laboratorio

Científicos británicos logran un hito al dar un paso más allá dentro del ámbito de la fecundación artificial

Imagen de archivo de un roedor de laboratorio
Imagen de archivo de un roedor de laboratoriolarazon

Científicos británicos logran un hito al dar un paso más allá dentro del ámbito de la fecundación artificial.

Se trata de un hito dentro de la reproducción humana. Científicos británicos han conseguido por primera vez cultivar óvulos fuera de un ovario y dentro de los límites del laboratorio, lo que abre las puertas a nuevas técnicas de fertilidad. Algo que, hasta ahora, sólo se había logrado con ratones. Y de éso hace más de dos décadas.

«Es un avance científico de indudable importancia», afirma a LA RAZÓN Justo Aznar, director del Instituto de Ciencias de la Vida de la Universidad Católica de Valencia. Sin embargo, como ocurre en el campo de la fecundación, el hallazgo tiene sus aristas éticas. «Estas técnicas van consolidando las probabilidades de crear seres humanos al margen de la relación natural», añade. Sin olvidar el hecho, apunta, de que hablamos de un proceso que conlleva la creación y manipulación de «bastantes embriones». Así, estaríamos dentro de una «ética utilitarista y práctica» de la ciencia. No en vano, los responsables del estudio están a la espera de obtener «aprobación» para fertilizar los óvulos. Algo que todavía «requiere mucha investigación».

Los investigadores, pertenecientes a la Royal Infirmary de Edimburgo, el Royal Hospital for Sick Children de esta ciudad escocesa, y el Center for Human Reproduction (CHR) de Nueva York extrajeron células de óvulos a partir del tejido ovárico donado por varias mujeres. Estas células se encontraban en sus fases más tempranas de desarrollo. A partir de ahí, los científicos crearon una serie de sustancias –los «medios de cultivo»– para facilitar el crecimiento de estas células hasta su punto máximo de madurez, listas para ser fertilizadas. Los científicos también han indagado sobre las fases de crecimiento del óvulo, un aspecto en torno al cual, a día de hoy, sigue habiendo interrogantes. Y es que este estudio, publicado en «Molecular Human Reproduction», se ha beneficiado de 30 años previos de investigaciones.

Es cierto que las mujeres pueden congelar sus óvulos, o incluso embriones si ya han sido fertilizados con el esperma de su pareja, antes de iniciar un tratamiento de fecundidad. Sin embargo, los óvulos sólo pueden congelarse en plena maduración; mientras, en la investigación, se trata de óvulos en fases muy tempranas. «El hecho de desarrollar del todo óvulos humanos podría ampliar el espectro de los tratamientos de fertilidad disponibles», afirmó Evely Telfer, de la Universidad de Edimburgo. Así, la nueva técnica podría permitir que niñas enfermas de cáncer, y que pueden quedar infértiles debido a la quimioterapia, conserven sus óvulos intactos para una futura fecundación.