Ley del Medicamento

Enfermería llevará a Amyts ante la justicia por negar la capacidad prescriptora de las profesionales

El Consejo General de las enfermeras tacha de "intolerables" las declaraciones del sindicato madrileño sobre que la ampliación de sus competencias pondría en riesgo la salud de los ciudadanos

El personal de enfermería pueda ya prescribir antitérmicos en Castilla y León
El personal de enfermería pueda ya prescribir antitérmicos en Castilla y LeónJcyl

Algunas de las medidas propuestas por el Ministerio de Sanidad en la reforma de la Ley del Medicamento y anunciadas hace un par de semanas, han convertido la actualidad sanitaria en un polvorín, enfrentando a las distintas profesiones entre ellas.

El anuncio de la ampliación de las competencias de prescripción de medicamentos y productos sanitarios a Enfermería ha hecho montar en cólera a distintos colectivos médicos, pero alguno que otro ha llegado más lejos en sus ataques.

Es el caso de la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), que, en un escrito en contra de dicha ampliación y otros aspectos del anteproyecto que prepara Sanidad, ha negado la competencia y capacidad de las enfermeras españolas como profesionales con facultad prescriptora (como ahora lo son, además de los médicos, los podólogos, los odontólogos y los veterinarios). "Se trata de dar capacidad de prescripción de medicamentos con peligrosidad, riesgo de uso anormal y tratamientos parenterales a colectivos con menor formación y capacitación en el ámbito de la fisiología y la farmacología humana y que, por tanto, no pueden ofrecer las garantías necesarias en cuanto a la calidad y control de los efectos de la prescripción; lo que podría derivar en errores terapéuticos, comprometer el equilibrio del tratamiento y afectar directamente a la salud y el bienestar de los pacientes”, señalaba el sindicato.

Ante estas afirmaciones, el CGE no ha tardado en reaccionar. "Es un ataque gratuito a las 345.000 enfermeras y enfermeros de España, por intereses corporativistas y trasnochados, que llevaremos ante los Tribunales", asegura Florentino Pérez Raya, presidente del CGE.

“No vamos a tolerar que se afirme que lo que dicta la legislación vigente en materia de indicación de medicamentos por parte de las enfermeras atenta contra la salud de las personas. Es una vergüenza. Las enfermeras/os están capacitados, por formación y por ley, para indicar fármacos en el ámbito de sus competencias. Son medidas que agilizan y mejoran el sistema sanitario, acciones incorporadas plenamente en algunos de los sistemas sanitarios más avanzados del mundo”, añade.

A su juicio, lo que señala Amyts en su comunicado es "intolerable", y sólo tiene por objeto "desinformar y alarmar a la población y, a la vez, presionar al Ministerio de Sanidad para que la Ley del Medicamento permanezca inmutable al devenir de los tiempos y se pueda adaptar a la realidad sanitaria del año 2025".

"Atentado a la verdad"

El CGE señala que las afirmaciones sobre que la prescripción enfermera es una amenaza para la salud pública "son un atentado a la verdad y pretenden infundir miedo y desconfianza en la población hacia los 345.000 profesionales de Enfermería que hay en nuestro país. Además, demuestran ignorancia, pues cualquier enfermera ha recibido los suficientes créditos de formación en farmacología durante sus estudios de Grado e incluso más que algunas de las profesiones que hoy en día ya están incluidas en la Ley con capacidad prescriptora", explica Pérez Raya

En la misma línea, el orgasmo colegial de las enfermeras asegura que el sindicato médico madrileño "intenta desprestigiar los sistemas sanitarios internacionales que han apostado por la prescripción enfermera cuando distintos estudios avalan su impacto positivo en la atención al paciente. Aduce que, en otras naciones, incluso existiendo esta regulación, existe un mayor control y restricción sobre la misma. Desconocen, pues, que todo el desarrollo de la prescripción enfermera se basa en actuaciones coordinadas, controladas y regladas y se circunscriben, como decíamos, a actuaciones con fármacos en el ámbito de las competencias de las enfermeras. La hiperbolización de la realidad y los supuestos riesgos no es de recibo ni propia de un sindicato serio", destaca.

Además, el presidente del CGE recuerda que "toda esta normativa surge fruto del consenso de la Enfermería con los propios representantes de los médicos -tanto a nivel profesional como sindical- y el Ministerio de Sanidad. Que hace unos años aprobaran esas medidas y ahora las tachen de 'peligro público' resulta sonrojante".

Por otra parte, el Consejo señala que el comunicado de Amyts incurre en contradicciones, pues en otro párrafo afirma: "Podríamos entender un modelo de indicación de enfermería en el entorno de sus competencias de cuidados, por la excepcional labor que realizan en su ámbito de competencias". "Entonces, ¿por qué atacar a la enfermería, si ese es, precisamente, el espíritu de la nueva redacción de la ley del Medicamento?", se preguntan desde el organismo."Se trata de adaptar una norma con más de dos décadas a sus espaldas a la realidad sanitaria del año 2025, donde existe una legislación -Real Decreto 954/2015- que regula la indicación de determinados fármacos y productos sanitarios dentro de las competencias enfermeras", explican.