Vejez

Esta anciana de 100 años revela su truco para tener una vida larga

La constancia de Ruth Lemay se alinea con décadas de investigación que destacan la importancia del ejercicio físico y la nutrición equilibrada para prevenir enfermedades y prolongar la esperanza de vida

Un entrenador personal revela los mejores ejercicios para las mujeres con menopausia
Un entrenador personal revela los mejores ejercicios para las mujeres con menopausiaPixabay

Ruth Lemay, una mujer estadounidense que acaba de cumplir 100 años, ha revelado cuál considera que es su fórmula para una vida larga y saludable: mantenerse activa y comer bien. Su historia, difundida por Fox News, rápidamente se viralizó por la sencillez de su mensaje. Lemay aseguró que sigue una rutina de ejercicios tres veces por semana, monta bicicleta reclinada varios kilómetros, camina a diario y procura llevar una dieta equilibrada rica en vegetales.

Un ejemplo que encaja con lo que dice la ciencia

La constancia de Ruth Lemay se alinea con décadas de investigación que destacan la importancia del ejercicio físico y la nutrición equilibrada para prevenir enfermedades y prolongar la esperanza de vida. Un estudio publicado en JAMA Network Open mostró que las personas mayores con hábitos saludables, como caminar, mantener una dieta variada y evitar el tabaco, tenían más probabilidades de alcanzar edades avanzadas con buena calidad de vida.

La alimentación basada en productos frescos, frutas, verduras, legumbres y proteínas ligeras, como la que sigue Lemay, también coincide con las conclusiones de una revisión publicada en Communications Biology, que asocia este tipo de dieta con menor riesgo cardiovascular, mejor función cerebral y envejecimiento más lento.

Además de los hábitos, la ciencia señala que las personas centenarias suelen compartir ciertos rasgos biológicos. Investigadores de la Universidad de Boston encontraron que algunos individuos mayores de 100 años poseen un sistema inmunitario más resistente y flexible, capaz de adaptarse a las infecciones y al paso del tiempo sin deteriorarse gravemente.

En paralelo, el entorno y el bienestar emocional también desempeñan un papel clave. Estudios sobre las llamadas Blue Zones, zonas del mundo con alta concentración de centenarios, como Okinawa (Japón) o Cerdeña (Italia), destacan que la longevidad no depende solo de la genética, sino también de factores sociales: vínculos comunitarios, rutinas tranquilas y propósito de vida.

Un ejemplo que encaja con lo que dice la ciencia

La ciencia coincide en que vivir más años no basta si no se acompañan de bienestar físico y mental. Mantener una rutina activa, como hace Lemay, reduce el riesgo de enfermedades neurodegenerativas, fortalece el corazón y mejora la memoria. Por su parte, una dieta equilibrada ayuda a controlar la inflamación y los niveles de azúcar, dos factores que aceleran el envejecimiento celular.