Política medioambiental

El Gobierno aprueba el estatuto de bomberos y agentes forestales: en qué consiste

El régimen de jubilación de los bomberos forestales se asimilará al de los "urbanos" para que se puedan retirar "anticipadamente"

Un bombero observa un incendio forestal
Un bombero observa un incendio forestal Europa Press

El Consejo de Ministros ha aprobado los dos proyectos de ley que regularán el nuevo Estatuto de bomberos forestales y agentes ambientales estableciendo el marco jurídico básico de ambos colectivos a los que pertenecen más de 26.000 profesionales, con el objetivo de unificar y mejorar sus condiciones laborales, que dependen de cada comunidad autónoma. Estas dos iniciativas son las mismas ya remitidas hace justo un año por el Gobierno y que decayeron debido a la convocatoria de elecciones generales.

Se trata de "dos proyectos importantes que hacen justicia con dos colectivos capitales en nuestro país", y que recogen varias de sus reclamaciones, ha asegurado la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO), Teresa Ribera. Entre otras de sus reivindicaciones, Ribera ha destacado la de equiparar la jubilación de los bomberos forestales a los urbanos lo que les permitirá retirarse anticipadamente, y también la posibilidad de que puedan acceder a una segunda actividad "siempre de acuerdo a un dictamen médico", en casos de capacidades disminuidas para prestar servicios ordinarios por incapacidad.

La norma, con vistas a estar operativa de cara a la próxima campaña contra incendios aunque dependerá del ritmo de su tramitación en el Parlamento, prevé la aprobación de un reglamento específico que tenga en consideración la exposición de riesgos especiales entre estos colectivos, informa Efe. Asimismo, el tipo de accidentes laborales que pueden sufrir los profesionales que luchan contra los incendios y las enfermedades profesionales específicas por el desempeño de sus funciones.

"Creemos que es imprescindible estar preparados los 365 días del año en materia de incendios, en prevención, en capacidad de reacción, si estos se producen, ya no es algo que ocurra en determinados momentos del año asociados a temperaturas de verano en zonas particularmente sensibles, sino que desgraciadamente cada vez son más frecuentes a lo largo del año y además la virulencia de estos incendios", ha asegurado la ministra en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros. Asimismo, ha destacado la relevancia en esa tarea de los agentes ambientales y forestales, "todos los días del año" y por ello la necesidad de un régimen laboral "reconocible en todo el territorio, con categorías profesionales, derechos laborales, con cobertura común".

En el caso de los bomberos forestales, la norma regulará con carácter básico las condiciones en las que estos profesionales, que prestan un servicio esencial y de interés social, llevan a cabo su trabajo, con independencia de la naturaleza jurídico laboral concreta que cada caso ostente. Los principales aspectos regulados son el reconocimiento legal expreso e individualizado de la categoría o figura de bombero forestal a nivel nacional. Asimismo, la definición de funciones que además de la extinción pueden incluir complementariamente prevención, detección, vigilancia, labores de información a la población, así como de apoyo a las contingencias en el medio natural y rural; prevención de riesgos laborales y defensa jurídica del colectivo. Se reconoce a todo el colectivo la aplicación del real decreto de jubilación anticipada de los bomberos al servicio de las administraciones y organismos públicos.

Por otra parte, las divergencias en los modelos organizativos y funcionales hacían necesaria la aprobación del marco básico de los agentes forestales y medioambientales a nivel nacional, ha añadido la ministra. Se reforzará la consideración de los agentes forestales y medioambientales como policía administrativa especial y policía judicial en sentido genérico. Además, tendrán a todos los efectos legales el carácter de agentes de la autoridad. Con el instrumento normativo que se ha aprobado se establece el marco jurídico básico en el que se define el estatus y las tareas a desempeñar por parte de los agentes forestales y medioambientales. Entre ellas, labores de custodia y vigilancia de la naturaleza, apoyo a la gestión del medio ambiente, y auxilio y colaboración en emergencias y protección civil en el medio natural.

CSIF exige que las normas se aprueben con urgencia

Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas, ha lamentado la demora y ha exigido que las normas se aprueben con urgencia ante los problemas en la gestión medioambiental y la prevención de los incendios de cara al próximo verano.

CSIF advierte de que ambas normas llegan muy tarde al Congreso de los Diputados, teniendo en cuenta los "problemas de coordinación y los déficit que arrastra España a la hora de abordar la política medioambiental, luchar de manera eficaz contra los incendios forestales y dotar a ambos colectivos de las condiciones laborales óptimas para abordar su función".

En este sentido, exige que ambas normas se tramiten con urgencia, principalmente en el caso de Bomberos Forestales para que se pueda aprobar en el presente período de sesiones y así poder contar con la norma para la campaña de incendios de este año. "Vigilaremos la tramitación parlamentaria para asegurar que las normas respondan a las necesidades de ambos colectivos", añaden en un comunicado.

En el caso de los bomberos forestales, el sindicato considera que se trata de una ley que debe unificar los protocolos de actuación, los dispositivos y las normas de seguridad contra los fuegos forestales para mejorar las tareas de extinción y la protección de este colectivo. "De no contar con el Estatuto, volveremos a afrontar otro verano nefasto como los últimos años, con miles de hectáreas quemadas y con riesgo de víctimas mortales. Actualmente, hay tantos modelos y protocolos antiincendios como comunidades autónomas, lo que dificulta enormemente las labores de extinción", afirman desde CSIF.

Por su parte, el sindicato considera que los agentes medioambientales requieren un incremento de efectivos, mejoras de medios materiales y de las condiciones laborales, así como seguridad jurídica en el conjunto del territorio nacional.