Reforma de la Ley del Aborto

La maternidad o el «Big Bang de la vida»

La Razón
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Nos adentramos en el misterio más grande y bello de la creación, el «Big Bang de la vida». Un hecho que madurará, hará crecer y mejorará la salud vital de la mujer; ya no será la misma. Cuando el «mejor» espermatozoide fecunda el óvulo materno, gran cantidad de información neuroquímica y células inundarán para siempre el cuerpo de la madre hasta cambiar su morfología y arquitectura cerebral y corporal. Todo ello la hará más inteligente, sana, vital y con fuerza para vencer el mundo. Por el contrario, todo «fracaso en la maternidad» producirá el efecto inverso, generando una espiral de pérdida en la mujer.

La naturaleza prepara periódicamente a la mujer para el momento de acoger la vida. Éste es un hecho único que sólo experimenta ella misma, la hace diferente y más fuerte, pero también mucho más frágil al entorno si no está protegida. A las 4-5 semanas, el corazón del bebé late a 180 pulsaciones por minuto. La madre puede sentirlo si permanece en silencio. Y es el momento en el que siente que está embarazada.

Tan sólo los niños menores y los animales, cercanos a la madre gestante, son observadores imparciales capaces anticipadamente de darse cuenta y acoger este fenómeno tan extraordinario. Acarician y rodean la «barriguita» con instinto protector. Para la mujer, la maternidad es una llamada temprana de la naturaleza hacia una madurez y plenitud de su feminidad. Por el contrario, para la sociedad moderna, en la que prima el capital productivo, la maternidad es un factor «no competitivo» que excluye a la mujer del mundo laboral. Esto ha hecho que de ser un derecho fundamental de la mujer se haya convertido en una mercancía cara y escasa.

La maternidad representa el 45% del PIB y acoge el «hábitat» donde se desarrollarán las capacidades intelectivas y emocionales del niño. Cualquier agresión externa, incluso el rechazo, generará en el bebé efectos secundarios adversos relacionados con trastornos de la personalidad, autismo y otros muchos padecimientos. La familia es la empresa más importante de un país y su madre, la CEO. Hay violencia en el mundo porque se nace en violencia y rechazo. Una madre acogida en su maternidad «vence el mundo» y nos hará superar todas las dificultades y crisis. Por el contrario, una gestante angustiada u oprimida por el miedo de su entorno se volverá lo más frágil del mundo, haciendo que la sociedad caiga con ella en una «espiral de pérdida». Nuestro reto es defender la maternidad posibilitando un «hábitat materno seguro» y un «vínculo de apego seguro» madre-hijo, necesario para que el bebé crezca, madure y se desarrolle íntegramente, como persona humana que es desde el seno materno.