Tribunales

Multa de 1,2 millones a la sanidad gallega por un error que dejó parapléjico a un niño

Sufrió una caída desde metro y medio mientras se encontraba en un parque

(Foto de ARCHIVO)Exterior del edificio del Tribunal Superior de Justicia de Galicia (A Coruña)EUROPA PRESS12/05/2010
Imagen del TSXG. EUROPA PRESSEuropa Press

La familia de un niño de Vigo, de 18 meses cuando hace seis años, el 14 de julio de 2019, ingresó en un servicio de urgencias de la ciudad tras sufrir una caída desde metro y medio mientras se encontraba en un parque, será indemnizada con 1,2 millones por acabar parapléjico tras mala praxis.

El Tribunal Superior de Justicia de Galicia rechaza en una amplia resolución de más de 40 páginas a la que EFE ha tenido acceso los recursos presentados tanto por el servicio gallego de salud (Sergas) como por la aseguradora XL Insurance y ratifica la sentencia del juzgado de lo contencioso administrativo número uno de Santiago, por lo que impone el pago de esa multa millonaria, además de la obligación de hacer frente a los intereses legales correspondientes.

La sentencia, que todavía no ha adquirido el carácter de firmeza, explica que al precipitarse el pequeño sufrió lesiones "visibles" en los estudios practicados que "pasaron desapercibidas" y apunta que lo ocurrido hubiese sido fácilmente "evitable" en caso de haber detectado en el Hospital Álvaro Cunqueiro justo después de ese accidente una microfractura en tres de sus vértebras que derivó en un hematoma epidural por sangrado.

Según la documentación, cuando llegó el niño al mencionado complejo médico le costaba extender el cuello y se llevaba la mano al flanco derecho. Así las cosas, de madrugada se le hizo una radiografía y un TAC y permaneció en observación, hasta recibir a las 8:10 horas del día siguiente el alta con tratamiento analgésico y vigilancia domiciliaria.

En la tarde del 15, doce horas después del primer contacto con el centro, volvió a ser trasladado allí por sus familiares, que lo veían quejoso, irritable y con una manifiesta incapacidad para sentarse.

Se le hicieron exploraciones complementarias y ya el 16, a las once, se apreció en el niño deterioro neurológico con debilidad importante en las extremidades inferiores, sin alcanzar la parálisis completa, así como imposibilidad de mantenerse en pie.

Tras un estudio neurofisiológico de conducción nerviosa, se informó a las 13:13 de que se descartaban datos "anormales", al igual que luego de la ausencia de "resultados de interés" después de un electroencefalograma. A las pocas horas, no obstante, presentaba ya una parálisis flácida en los miembros izquierdos.

En la exploración se observó ausencia de fuerza y sensibilidad, falta de reflejo y descoordinación respiratoria. Por la tarde de ese día, del 16, acabó en la UCI de Pediatría y se le practicó una resonancia magnética cerebral y cérvico-dorso-lumbar bajo sedación.

El resultado fue el hallazgo de lesiones traumáticas en vértebras torácicas, edema medular y colección hemorrágica epidural de gran tamaño, lateral al cordón medular en el lado izquierdo y que comprimía su médula.

El 22 se le realizó otra resonancia magnética que reveló persistencia de los signos de mielopatía aguda, un daño en la médula con variedad de síntomas neurológicos, y el 30 recibió el alta para su traslado al Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo "dada la gravedad del compromiso neurológico y la pobre ganancia clínica".

Allí recibió el alta el 6 de marzo de 2020, con vuelta a su área sanitaria, y el 18 de septiembre de ese año el equipo de valoración de Vigo emitió un dictamen que describe una paraplejia secundaria a mielopatía de origen traumático con un 83 % de discapacidad, informa Efe.