Cargando...

Altavoz perro globo

El perro globo de Jeff Koons ahora suena: así es el altavoz más inesperado del año

La marca francesa Lexon convierte la icónica escultura del artista estadounidense en un dispositivo Bluetooth de gama alta

Este es el altavoz inspirado por la obra de Jeff Koons Lexon

Jeff Koons, el artista estadounidense conocido por sus esculturas de globos metálicos gigantes, ha decidido que sus famosos perros también pueden sonar. El Balloon Dog Speaker ya es una realidad gracias a Lexon, la marca francesa que se ha atrevido a convertir una de las obras más caras jamás vendidas en un altavoz Bluetooth de 750 dólares.

La idea no es tan descabellada como parece. Koons lleva décadas convirtiendo objetos cotidianos en arte millonario, así que dar el salto a la tecnología era solo cuestión de tiempo. eCoustics ha confirmado que el dispositivo mantiene las proporciones exactas del perro globo original, pero ahora reproduce música.

Un altavoz que es también una obra de arte

El Balloon Dog Speaker es prácticamente idéntico a las esculturas de Koons que se venden por millones de dólares. Su carcasa está hecha de polcarbonato óptico transparente con un acabado brillante que refleja la luz igual que las versiones en acero inoxidable que se exhiben en museos como el MoMA o el Centre Pompidou.

Las dimensiones son compactas: 29 centímetros de altura por 28 de ancho. Pesa menos de un kilogramo, así que técnicamente es portátil, aunque con ese precio uno no se lo llevaría precisamente a la playa. La tecnología es bastante estándar. Incluye conectividad Bluetooth 5.0, una batería que dura hasta 10 horas y se carga por USB-C. Los controles están integrados en el propio diseño: tocas el hocico para cambiar el volumen y las orejas para saltar canciones.

El sistema de sonido tiene seis altavoces activos y cuatro resonadores pasivos repartidos por toda la estructura. Lexon dice que ofrece sonido envolvente de 360 grados, aunque no han dado especificaciones técnicas concretas sobre potencia o respuesta en frecuencia. Cada unidad viene con certificado de autenticidad firmado por Jeff Koons y un cable USB-C con terminales magnéticos. La producción está limitada a menos de 10.000 unidades en todo el mundo, lo que explica en parte el precio.

También incluye micrófono para llamadas y capacidad TWS para usar dos unidades en estéreo. Eso sí, no tiene puertos auxiliares ni otras conexiones, solo Bluetooth. Es un producto muy específico. No es para quien busca el mejor sonido por 750 dólares, sino para quien quiere una pieza de diseño que además suene. Está compitiendo más con objetos de decoración premium que con altavoces convencionales.

Las primeras unidades llegarán a Europa el próximo mes, solo a través de distribuidores autorizados de Lexon. Será interesante ver si el nombre de Jeff Koons es suficiente para justificar ese precio en un mercado lleno de opciones más baratas y con mejores especificaciones.