Un informe desclasificado de la CIA, perteneciente a los años de la Guerra Fría, y que relata el supuesto enfrentamiento entre soldados soviéticos y un OVNI en Ucrania, se ha hecho viral y ha vuelto a la actualidad, según informa The New York Post. La historia está recogida originalmente en otro informe de la KGB, la agencia de inteligencia y seguridad de la URSS, de 250 páginas en el que se describe cómo los alienígenas fueron atacados por los soviéticos y respondieron transformando a 23 soldados en ‘postes de piedra’.

La historia es increíble, en el sentido más literal del término, por razones obvias. Pero es cierto que el informe de la KGB existe, llegó a manos de la CIA tras la disolución de la Unión Soviética en 1991, y que la agencia tomó nota del mismo. Este último informe fue originalmente desclasificado en el año 2000 y ha vuelto a la actualidad tras la creación en 2022 del Equipo de Estudio Independiente de Fenómenos Anómalos No Identificados de la NASA, un panel de 16 expertos que intenta proporcionar una teoría alternativa a las especulaciones sobre la vida extraterrestre.

Según el informe de la CIA, el documento de la KGB contiene fotografías, dibujos y el relato de testigos presentes en el supuesto suceso que califica como ‘una horrible imagen de la venganza por parte de criaturas alienígenas, una imagen que te congela la sangre’.

La URSS contra los platillos volantes

Según el relato de la KGB, una nave espacial con forma de platillo volante apareció volando sobre una unidad militar soviética que estaba realizando maniobras en Ucrania. La CIA no concreta en qué año sucedió, pero sí que ‘por razones desconocidas’, se abrió fuego contra el OVNI con un misil tierra-aire.

Sorprendentemente, dada la avanzada tecnología que se le supone a unos alienígenas que se han venido hasta Ucrania con su platillo volante, el misil impactó en el OVNI y lo derribó, no lejos de donde se encontraban los soldados. De los restos emergieron cinco figuras humanoides, de baja estatura y con ‘grandes cabezas y grandes ojos negros’.

El testimonio recogido por la KGB pertenece a los dos únicos soldados que supuestamente sobrevivieron a este encuentro. Los cinco alienígenas se acercaron unos a otros y ‘se fundieron en un objeto que tomó una forma esférica’. Este comenzó a emitir sonidos como zumbidos y silbidos mientras se volvía cada vez más resplandeciente y crecía de tamaño. Tras unos segundos, la esfera explotó con una luz ‘extremadamente brillante’. En ese instante, 23 soldados que estaban observando la situación se transformaron en ‘postes de piedra’. Los dos presuntos supervivientes se encontraban a la sombra cuando los alienígenas estallaron y menos expuestos a la luz que, según la KGB, se generó.

Los 23 ‘soldados petrificados’ y los restos del OVNI habrían sido trasladados a un instituto secreto de investigación científica cerca de Moscú. ‘Los especialistas asumen que una fuente de energía, aún desconocida en la Tierra, cambió instantáneamente la estructura del organismo de los soldados, transformándola en una sustancia cuya composición molecular no difiere de la de la caliza’, relata la CIA.

El informe también cita la declaración de un representante de la agencia de inteligencia estadounidense: ‘Si el informe de la KGB es real, este es un caso extremadamente amenazador. Los alienígenas disponen de armas y tecnología que van mucho más allá de lo que conocemos. Pueden defenderse si son atacados’. Que pulverizarse en una explosión sea la mejor táctica de defensa para una civilización avanzada, ya es otra cosa en la que la CIA no entra.

Aunque la historia sea entretenida y figure en documentos oficiales de agencias de investigación de Estados Unidos y la extinta Unión Soviética, darle veracidad implica que hay que asumir que hay alienígenas con una tecnología tan avanzada como para venirse a la Tierra en un platillo volante, capaces de cambiar la estructura molecular de seres vivos y que se inmolan como si fueran terroristas islámicos. Más probable es que se trate, por ejemplo, de una historia fabricada para encubrir algún tipo de suceso en el que murieron los 23 soldados o por cualquier otra razón.