El Intermedio
El Gran Wyoming es tajante sobre el problema de la vivienda en España: “Estamos ante una verdadera emergencia nacional”
La crisis de la vivienda muestra su cara más trágica con el suicidio de un anciano en Torremolinos en mitad de un nuevo repunte de los desahucios
La vivienda en España ha dejado de ser un problema para convertirse en una herida abierta que atraviesa todo el tejido social. La crisis ya no distingue entre clases ni edades, golpeando con una dureza inusitada a perfiles que hasta hace poco se consideraban a salvo. La imagen más clara de esta nueva realidad es la de trabajadores con empleo estable que, incapaces de afrontar un alquiler en solitario, se ven obligados a compartir piso como si fueran eternos universitarios.
De hecho, esta asfixia residencial se ceba especialmente con los más jóvenes. Para toda una generación, la emancipación se ha convertido en una quimera, un horizonte inalcanzable que frustra sus proyectos vitales y los condena a una precariedad que va mucho más allá de lo económico. Se trata de un muro que les impide construir un futuro autónomo, generando una incertidumbre que define sus vidas.
Asimismo, las cifras oficiales no hacen más que confirmar la gravedad del panorama. Durante el segundo trimestre de 2025, los desahucios por impago de hipoteca se dispararon un alarmante 28%, un dato que evidencia la fragilidad de miles de familias. Los números son fríos, pero detrás de cada punto porcentual se esconde un drama personal.
En este sentido, la crudeza de la estadística encuentra su reflejo más desolador en sucesos como el ocurrido en Torremolinos. Allí, un anciano de 80 años se quitó la vida justo cuando la comitiva judicial procedía a desalojarle de la que había sido su casa. Una tragedia que pone rostro a la desesperación más absoluta.
La inacción política como epicentro de las críticas
Ante esta situación, son cada vez más las voces que denuncian la pasividad de las instituciones. El Gran Wyoming, por ejemplo, fue tajante en El Intermedio, al asegurar que "estamos ante una verdadera emergencia nacional". Sus palabras resuenan con fuerza en un debate público que exige respuestas urgentes.
Por otro lado, el conocido comunicador extendió su reproche a los responsables políticos, a quienes acusa directamente de una falta de respuesta política eficaz y contundente. Denunció que esta inacción está dejando a miles de ciudadanos en una situación de completo desamparo, abandonados a su suerte frente a un problema de una envergadura colosal.
En definitiva, el acceso a una vivienda digna se consolida como uno de los principales focos de preocupación en el país. Ya no es solo una cuestión económica, sino una profunda fractura social que amenaza la cohesión y que demanda una acción decidida por parte de quienes tienen la responsabilidad de gobernar.