Polémica

Jordi Cruz, jurado de 'MasterChef' se sincera sobre su forma de ser: "A veces no se sentir"

El catalán, uno de los jueces más temidos del concurso, ha sobrecogido con unas declaraciones muy personales

Jordi Cruz, jurado de 'MasterChef'
Jordi Cruz, jurado de 'MasterChef'larazonlarazon

'MasterChef 13' echó a rodar hace dos lunes, certificando que es el certamen culinario más importante del ente público ya que fue líder en su franja durante su primera emisión de la temporada. Entre el jurado, vuelve a estar presente Jordi Cruz, que ya eligió en el pasado al mejor aspirante de la historia del concurso y que esta vez ha vuelto a sincerarse, pero con uno mismo, admitiendo que en ocasiones 'le cuesta sentir, como a su padre', una forma de ser que ayuda a entender en ocasiones su severidad en cuanto a las evaluaciones dentro del reality culinario, ya que Jordi Cruz es el jurado y presentador más temidos del programa de RTVE del trío que conforma con Samantha Vallejo-Nágera y Pepe Rodríguez, que ha admitido también que 'MasterChef' le ha cambiado la vida.

Una herencia de su padre

En una entrevista recogida por la revista Lecturas, Jordi Cruz abrió su corazón como pocas veces, recordando una infancia marcada por la inseguridad y el deseo de encajar. “Me sentía muy burro, muy pequeñito. ¡Y más en los estudios! Era malo en casi todo”, confesó el chef, quien encontró en la cocina su forma de conectar con los demás: “Vi que para eso tenía virtud, tenía talento, y que por ahí podía ganarme el cariño, que me dijeran: ‘Mira, el chaval no es tonto’”. Sus primeras travesuras también revelan su necesidad de afecto: “Robé dinero a mi madre para comprar chuches para los chicos de clase”. Aunque recibió una reprimenda que recuerda hasta hoy, su visión de su madre está llena de admiración: “Es una heroína y quiero corresponder su sacrificio”. En contraste, la relación con su padre fue distante: “Nunca me dijo ‘te quiero’. Ni yo a él”. Y ahí, confiesa una herida profunda: “Yo soy de silicona. Tengo la misma enfermedad que mi padre, que a veces no sabes sentir”. Una lucha interna que aún le acompaña.

Convertido ahora en padre, Jordi Cruz mostró en Lecturas una faceta tierna y transformada por la paternidad. En el pódcast A solas con de Vicky Martín Berrocal, explicó: “La pandemia me sirvió para descubrir que en mi casa tenía un nido: puse el nido bonito y encima me enamoré, me casé y nació un niño que me ha hecho tener miedo a morirme. Antes no lo tenía pero ahora sí lo tengo”. Su hijo se ha vuelto el centro de su mundo: “Le quiero proteger y quiero estar ahí para que no le falte de nada”. La llegada de ese amor incondicional también lo confrontó con su dificultad para expresar emociones, algo que hereda de su padre: “Él no tenía la habilidad de ser cariñoso y seguro que lo era. A mí me pasa lo mismo, me cuesta mucho expresarme”. Con ternura y humor, describe a su hijo: “Es guapo, es bueno... Ha salido a la madre, lógicamente”. Y se ríe al pensar en el futuro: “Si el segundo me sale malo, no pasa nada, me compensa. El segundo podrá parecerse a mí”, espetó el chef y jurado del certamen culinario más exitoso del ente público.