Beneficios

Estos son los beneficios desconocidos de comer regaliz, según los expertos

La raíz del regaliz es una de las medicinas más antiguas, utilizada por muchas culturas asiáticas y europeas

Años y años comiendo regaliz. Regaliz en caramelos, golosinas o las famosas pastillas de la marca Juanola. Hay quien lo prueba y no repite
Años y años comiendo regaliz. Regaliz en caramelos, golosinas o las famosas pastillas de la marca Juanola. Hay quien lo prueba y no repiteObjetivo BienestarArchivo

El regaliz (Glycyrrhiza glabra L., Glycyrrhiza uralensis, gan cao) es una planta herbácea vivaz, de alrededor de un metro de altura, conocida por su raíz dulce. Su nombre proviene del griego glykyrrhza y en latín pasó a liquiritia. Es originaria de la región mediterránea, Asia Menor y China.

Su cultivo y uso medicinal se remontan a tiempos antiguos, siendo documentada en Alemania en 1536. Se multiplica por semillas o esquejes de raíz, y su cosecha se realiza desde 3 hasta 5 años. Actualmente, se cultiva principalmente en España, Italia, Turquía, India y China. El rizoma seco y el jarabe negro son sus principales productos, caracterizados por un sabor dulce y un aroma que recuerda al anís y al hinojo.

Larga vida de la raíz del regaliz

En la medicina china, se conoce desde hace más de 2.000 años, donde se valoraba por fortalecer los músculos y huesos, mejorar la piel y como antídoto, aunque un uso excesivo podía causar hinchazón. Los egipcios lo usaban para problemas respiratorios, mientras que griegos y romanos lo empleaban para el asma, las úlceras y la sed.

En textos antiguos como el Código de Hammurabi y el Papiro de Ebers, ya se mencionaba como medicamento. Teofrasto, Plinio el Viejo y Dioscórides también describieron sus propiedades, destacando su capacidad para calmar la tos, reducir la sed y tratar problemas digestivos. Hildegarda de Bingen, en la Edad Media, señaló que mejoraba la voz, aclaraba la mente, ayudaba con la digestión e incluso era útil para calmar la ira en enfermos mentales.

Beneficios que no conocías

La raíz del regaliz tiene varias propiedades medicinales gracias a sus componentes. Funciona como expectorante, ayudando a expulsar la mucosidad en casos de tos e inflamaciones respiratorias. Además, tiene efectos antivirales y antibacterianos, ayudando a combatir infecciones. Su compuesto llamado ácido glicirricínico es eficaz contra las úlceras gástricas, ya que favorece la producción de mucosa en el estómago. También ha mostrado buenos resultados para eliminar la bacteria Helicobacter pylori, incluso en cepas resistentes a ciertos antibióticos.

En fitoterapia occidental, el regaliz se usa para tratar el catarro y las úlceras del estómago. Sin embargo, debe evitarse en personas con enfermedades hepáticas, hipertensión o problemas renales. El uso prolongado y en dosis altas puede causar efectos secundarios como retención de líquidos, pérdida de potasio, e hipertensión.

La dosis recomendada varía, pero suele ser de 5 a 15 gramos al día. Para la tos, se puede preparar una infusión con una cucharadita de raíz en agua hirviendo, bebiendo una taza varias veces al día. En la medicina china, también se usa para equilibrar y calmar el hígado y eliminar el exceso de calor en el cuerpo.

Existen varias infusiones recomendadas para el tránsito intestinal, así como para reducir la hinchazón del estómago y las flatulencias
Existen varias infusiones recomendadas para el tránsito intestinal, así como para reducir la hinchazón del estómago y las flatulenciaslarazon

Infusión aromática de regaliz

Ingredientes:

  • 2 piezas de anís estrellado
  • 15 clavos
  • 7 semillas de cardamomo
  • 1 rama de canela mediana
  • 1 trozo de raíz fresca de jengibre
  • 1 cucharada de raíz de regaliz triturada
  • Peladura de naranja
  • 20 gr de té negro
  • Nata dulce
  • Azúcar morena de caña
  • 3/8 de 1L de leche

Preparación:

Tuesta ligeramente los clavos, la canela, el cardamomo y el anís estrellado en una olla sin añadir aceite. Luego, añade tres cuartos de litro de agua junto con la raíz de regaliz triturada y deja hervir durante unos 5 minutos. Corta el jengibre en rodajas o trozos, retira la cáscara de la naranja y agrégalos a la olla junto con las hojas de té. Cocina bien la mezcla y, después, retírala del fuego, dejando reposar al menos 5 minutos. Añade la leche y calienta de nuevo. Cuela la infusión en una tetera y disfruta con un toque de nata dulce o azúcar morena, a tu gusto.