Las dos únicas pirámides en Europa (una de ellas en España)

Al ser humano le encanta innovar. En múltiples campos esto ocurre desde hace siglos. Además, sin estas nuevas apariciones sería impensable alcanzar el nivel que la humanidad ha conseguido. Así, desde tiempos inmemoriales las personas hemos rumiado largo y tendido acerca de como poder avanzar.

Las construcciones son un buen ejemplo de esta búsqueda. Desde hace siglos el ser humano se ha dedicado a edificar todo tipo de elementos más allá de lo básico. Así, atrás quedaron los hogares o graneros dando paso a autenticas obras faraónicas que trataban de evidenciar distintos aspectos como el poder o la adoración a divinidades.

Existen, por ejemplo, ciudades que son reconocidas alrededor del mundo por sus edificaciones. Nueva York con los rascacielos o París con algunos de sus monumentos son solamente dos ejemplos de todo lo que podemos encontrar alrededor del mundo. Algunas, incluso, son capaces de referenciar antiguos imperios como el caso de las pirámides y Egipto.

Pese a que solemos pensar en estas edificaciones como exóticas existen dos casos en Europa. Así, podemos disfrutar de alguna de estas sin tener que viajar a Egipto o México, salvando las distancias, y observar alguna cerca o en nuestro propio país.

Pirámides en Europa

El primer caso lo tenemos en España. Entre todas las maravillas que el país esconde existe una edificación de este tipo. La Pirámide de los italianos es toda una excentricidad en nuestro país que fue construida en 1939 para conmemorar a los combatientes del país transalpino en la Guerra Civil cuando lucharon al lado de Francisco Franco.

Así, gracias a la ayuda prestada por Benito Mussolini a Franco durante la Guerra Civil el dictador español decidió homenajear a los italianos caídos en la contienda. Con algo más de 20 metros cuenta con una estructura piramidal típica recubierta con placas calizas. Su ubicación está en Burgos, en el Valle de Valdebezana, Castilla y León, donde su estructura destaca por encima del paisaje debido a su peculiar forma.

Tras su construcción la edificación albergó los cadáveres de 300 soldados italianos aunque en 1975 Italia reclamó los cuerpos. Desde ese momento la pirámide quedó vacía aunque persisten los nichos en su interior.

La segunda pirámide en Europa la encontramos en Holanda. Se trata de la de Austerlitz ubicada en la población de Amersfoot. Su edad es mayor que la española cuya construcción se remonta a 1804 cuando los soldados de Napoleón la levantaron inspirándose en la Pirámide de Giza.

Su construcción, además, fue todo un hito. Se tardaron solamente 27 días en levantarla pese a contar con 36 metros de altura. Así, esta pirámide erigida en tributo al emperador francés cuya construcción fue dirigida por el general Marmont supone toda una excepcionalidad en la zona.

Incluso, en el vértice de la pirámide se instaló un enorme obelisco de madera con 13 metros de altura. Todo ello, gracias a la fascinación que causó en el general su viaje a las pirámides egipcias. Cabe destacar, además, que esta se degradó rápidamente aunque durante el año 2004 fue restaurada para ser una atracción turística en la zona gracias a su rareza.

Polémica en Bosnia

Una colina arbolada en el pueblo de Visoko, muy cercano a Sarajevo, ha conllevado un sinfín de teorías para ser la tercera pirámide de Europa. Algunos visitantes, como el mismo Novak Djokovic, argumentan que esta cuenta con una gran energía pese a que los expertos han descartado en más de una ocasión que se trate de una edificación.

Sin embargo, existe un fuerte movimiento cuyo argumento expone que se trata de una pirámide. Semir Osmanagic, apasionado de las civilizaciones antiguas, es uno de los máximos instigadores de esta teoría. Incluso, ha llegado a exponer que se esta es superior a la de Keops. Además, según Osmanagic la orientación de esta montaña se encuentra perfectamente alienada con los puntos cardinales.