Ecuador de la legislatura

Recomendación serie
Aunque el auge de las series históricas y fantásticas nos ha dejado producciones intensas y épicas como Vikingos o Juego de Tronos, a lo que no estamos acostumbrados es a que este tipo de historias se crucen con la comedia. Sin embargo, existe una serie que, consciente de esta limitación, ha sido capaz de unir ambos géneros con enorme acierto: una propuesta que no solo se ríe de los tópicos de los dramas medievales, sino que logra construir una sátira única, ingeniosa y sorprendentemente adictiva.
Lo que empieza pareciendo un simple chiste histórico sin recorrido, no tarda en convertirse en un desfile de situaciones absurdas, choques de egos y comentarios ingeniosos que, por extraño que suene, encajan de forma magistral con su estética. Esta serie mezcla lo mejor del humor incómodo y los enredos personales al más puro estilo The Office, pero con un retrato paródico de las costumbres vikingas.
Norsemen nos sitúa en un pequeño asentamiento vikingo que, en teoría, debería estar protagonizado por guerreros feroces y tradiciones bárbaras, pero que en la práctica está muy lejos de ello. En cada episodio mezcla tramas cotidianas de un pueblo de esta sociedad con saqueos, conquistas y conflictos absurdos, todo tratado con un tono que consigue desarmar por completo cualquier épica hasta que ya ni la esperas.
El gran mérito de la serie está en cómo logra ese equilibrio entre lo ridículo y lo realista. Sus personajes luchan por tomarse a sí mismos muy en serio, aunque cada vez que entran en acción o que simplemente abren la boca pierden toda credibilidad. Esto no significa que la serie apueste por un humor ridículo y absurdo, porque los diálogos están llenos de ironía. Además, a pesar de que los conflictos se enfoquen desde una perspectiva que tiende a ridiculizarlos, sí tratan temas que, sobre el papel, son serios e importantes, como el liderazgo, las relaciones o las normas sociales.
Norsemen está disponible en Netflix y cuenta con tres temporadas completas. Aunque es muy probable que no conocieses esta producción y que te parezca en un principio que su planteamiento carece de sentido, puede convertirse en tu nuevo descubrimiento favorito. Si te gustan las historias vikingas, pero te apetece algo que las rompa desde el humor, esta sátira es justo lo que estabas buscando.
Ecuador de la legislatura